El Ministerio del Interior ha tomado la decisión de repartir el tercer y último tramo de la equiparación salarial para los agentes de las fuerzas de seguridad del Estado, después de que asociaciones y sindicatos no hayan llegado a un acuerdo: el 59% será para la Guardia Civil y el 41% para la Policía Nacional.

Una decisión que ha tomado el departamento que dirige Fernando Grande-Marlaska tras constatar que las negociaciones entre las asociaciones de la Guardia Civil y los sindicatos policiales no han prosperado.

Según han indicado fuentes de Interior, este departamento ha recurrido al último acuerdo que alcanzaron sindicatos y asociaciones en marzo de 2018 para tomar su decisión, que les han comunicado esta tarde los directores de ambos cuerpos, María Gámez y Francisco Pardo.

De este modo, y en virtud del acuerdo de 2018, el desglose del tercer y último tramo de la equiparación salarial será del 41% para la Policía Nacional y del 59% para la Guardia Civil, como también fue así para el primer tramo. El tercer tramo  se hará efectivo en cuanto concluya el proceso técnico y se verá reflejado en las nóminas de los agentes con efectos retroactivos al pasado uno de enero.

Un pago que supone el desbloqueo de 247 millones de euros por parte del Ministerio del Interior para completar el proceso iniciado hace dos años y que, cuando concluya, significará un incremento de un 20% de media en las nóminas de policías nacionales y guardias civiles, la mayor subida salarial de toda la historia de este departamento.

El actual equipo ya ha impulsado la ejecución de los dos primeros tramos de este proceso, en octubre de 2018 y abril de 2019, en ambas ocasiones con efectos retroactivos al primero de enero de cada año y con un monto total de 560 millones de euros. Con estos 247 millones de euros habilitados por el Consejo de Ministros, el proceso de equiparación salarial alcanza los 807 millones de euros fijados en el acuerdo de 2018.

El acuerdo de equiparación salarial fue suscrito el 12 de marzo de 2018 entre el Ministerio del Interior y los sindicatos y organizaciones representativas de las plantillas de Policía Nacional y Guardia Civil. En ese mismo acuerdo, las asociaciones y sindicatos pactaron el desglose ahora aplicado al tercer tramo. A su llegada al Ministerio, Marlaska impulsó la tramitación del acuerdo, que estaba firmado por el anterior Gobierno del PP pero no se había puesto en marcha.