Cerca de 200 personas se quedan en la calle en Ibiza tras el desalojo de una finca donde los inquilinos pagaban por residir

Alrededor de 200 personas, incluidos menores, se han quedado en la calle tras ser desalojadas del lugar donde vivían, el poblado de Can Rova, en Ibiza. El propietario de la finca alquilaba ilegalmente determinado terreno por 300 y 500 euros a los inquilinos que se asentaban en caravanas o tiendas de campaña. 

Alguno de los desalojados ha denunciado haber sido agredidos por la Policía, como es el caso de Daniela, a la que han "empujado" y ha caído al suelo con su bebé de cinco meses en brazos mientras su marido ha sido arrestado por defenderlos, ha asegurado. 

El Sindicato de Inquilinas de Ibiza, por su parte, ha mostrado su "total repulsa" a la expulsión de las familias que habitaban en Can Rova. La entidad ha explicado que los afectados, debido a la "extrema" situación de la vivienda en la ciudad, se vieron forzadas a instalarse en una parcela con caravanas, casetas o tiendas de campañas. 

El problema de vivienda en Ibiza es "muy grave", ha afirmado este jueves la presidenta del Govern balear, Marga Prohens (PP), a raíz del desalojo, un hecho que ha supuesto "un punto más visible" a este asunto. Son "unas imágenes muy dolorosas", ha detallado. 

La problemática habitacional es consecuencia, entre otras cosas, de "haber mirado hacia otro lado durante muchos años, cuando se ha incrementado más que nunca el precio de la vivienda y no se habían querido poner soluciones", ha señalado Prohens. 

Desde el sindicato han resaltado la "nula gestión" que se hace en materia de vivienda por parte de todas las instituciones de la isla, ante la "negativa" a aplicar la ley de vivienda. Las "pocas regulaciones" que aplica el Govern solo sirven para "poder generar notas de prensa" y han conducido a Ibiza a "un sistema insostenible para la vida", han añadido.

30 personas realojadas 

Un grupo de 30 personas, entre adultos y menores, de Can Rova han sido acogidos en diferentes dependencias. Según ha informado el Ayuntamiento de Santa Eulària, el equipo de los Servicios Sociales determinó la situación de vulnerabilidad y se coordinó con Cáritas para ofrecer la asistencia. 

De este modo, diez personas entre mujeres y niños se han alojado en el Centro de Acogida Nazaret, tres hombres adultos han sido trasladados al Centro de Baja Exigencia de sa Joveria y otros 20 afectados han pernoctado en el polideportivo del CEIP S'Olivera.