Anoche Enrique Iglesias tuvo un concierto de lo más accidentado. Se presentaba ante más de 12.000 espectadores en la plaza de toros de Tijuana (México) pero el show no terminó como le hubiera gustado. En un momento del espectáculo el cantante español empezó a interactuar con un dron que graba y emite imágenes del concierto para ofrecer planos en primera persona. 

Pero esta vez algo salió mal, el robot volador hizo un giro inesperado y sus hélices hirieron dos dedos de la mano de Iglesias, que comenzó a sangrar inmediatamente. Este domingo su representante, Joe Bonilla, explicaba el incidente en Instagram para el resto de los fans que no estaban presentes en el concierto: "Ayer @enriqueiglesias sufrió un accidente durante su show en Tijuana. Decidió continuar el concierto para después ser atendido en Los Angeles. Su mano va recuperándose".

Tras ser "atendido por el personal en el lateral del escenario por el personal que intentó parar la hemorragia. El cantante quiso hacerse el valiente y continuar con el concierto, a pesar de que "le aconsejaron que parase el espectáculo" y pese a que continuó sangrando, como dan fe las fotografías colgadas por Bonilla del cantante con la mano vendada y llena de sangre, al igual que la camiseta blanca que llevaba, que terminó salpicada de rojo.

Tras terminar el concierto, que forma parte de su gira mundial #SexandLove, Iglesias fue trasladado en ambulancia al aeropuerto y de allí cogió un vuelo rumbo a Los Ángeles, donde se recupera de su accidente. Seguro que a partir de ahora se pensará usar más drones durante sus actuaciones.