Julio arranca con los embalses al 45% de su capacidad, 20 puntos menos que la media decenal

España hace frente en julio a uno de los periodos más calurosos del año. Los embalses en el territorio albergan el 45,3% de su capacidad, lo que significa 20 puntos porcentuales por debajo de la media de los últimos diez años (66,1%).

Así lo han señalado los datos del Ministerio para la Transición Ecológica al registrar la peor cifra de la capacidad de los pantanos desde el 2004 durante los primeros días de este mes.

La reserva actual de agua con 25.443 hectómetros cúbicos acumula unos 5.000 hectómetros cúbicos menos que el año pasado, cuando alcanzó los 30.974 hm3 y alrededor de 11.000 hm3 menos que hace diez años.

Desde la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) señalan la escasez de las lluvias de junio. Se trata del tercer año más seco del siglo XXI en cuestiones hidrológicas y el cuarto más seco desde el 1961.

El técnico de la Aemet Rubén del Campo ha indicado la probabilidad de que el último trimestre del año hidrológico sea menos lluvioso que lo habitual en todo el territorio. De esta forma, añade que este ciclo seco evoluciona por la falta de lluvias que impacta en la sequía hidrológica y agrícola.

Niveles de alerta

Por el momento, las 16 cuencas existentes con niveles por encima del 50% se encuentran en las cuencas internas de Euskadi (90,5%), Cantábrico oriental (82,2%), en la costa de Galicia (68,1%), Catalunya (52,1%), la cuenca mediterránea andaluza (48,8%) o la del Guadalquivir (28%), entre otras.

Esta última cuenca se sitúa con una capacidad de 8.113 hm3 con apenas 2.269 hm3, con 2.500 hm3 menos que la media de la década. Estos datos posicionan a la cavidad en estado de alerta por la escasez y la sequía.

La Aemet señala que este año es el cuarto más seco desde 1961

La situación de la cuenca del Gualdaquivir es similar al cauce del Tajo, con una capacidad de 11.506 hm3 y que alberga por el momento aproximadamente 4.991 hm3. Se trata de 2.000 hm3 menos que la media del decenio.

Los niveles de alerta de las cuencas se sitúan en un escenario perpetrado por el calentamiento global y que confirman las predicciones de cambio climático para el sector del mediterráneo. Naciones Unidas ya hizo el anuncio al apuntar que esta tendencia de sequías más frecuentes y severas se agravarán durante las próximas décadas.