El nuevo sistema de vigilancia contra la covid, acordado por las comunidades autónomas y el Ministerio de Sanidad, contabilizará únicamente los casos graves y vulnerables causados por la enfermedad, así como los posibles aumentos de la incidencia y las nuevas variantes.

Así lo recoge el texto aprobado por las autoridades sanitarias, que se habían reunido este miércoles en la ciudad de Zaragoza, para abordar la nueva estrategia del sistema de vigilancia de la situación actual contra el virus, que ha marcado como horizonte máximo el mes de marzo de 2023.

Durante el encuentro, Sanidad ha determinado que habrá una "fase de transición" para vigilar los casos de coronavirus. Posteriormente, se implementará el Sistema de Vigilancia centinela de Infecciones Respiratorias Agudas Leves (IRAs) tanto en la atención médica primaria como en la hospitalaria grave.

Según la secretaria de Estado de Sanidad, Silvia Calzón, la vigilancia centinela es un método para recopilar datos epidemiológicos de manera sistemática y rutinaria en un número limitado de puntos, a través de la notificación de determinados facultativos en la Atención Primaria. Estos profesionales se eligen para que la muestra sea representativa de la población general.

"Creíamos fundamental la necesidad de acelerar el proceso de implementación de los sistemas de vigilancia centinela, que van a ser absolutamente fundamentales para conseguir de una manera práctica la vigilancia de la covid, la gripe, del virus respiratorio sincitial (VRS), etc. Es una vigilancia más sostenible en el tiempo, más eficiente para los profesionales. Puede aportar una información de gran valor de la evolución de las infecciones y cuáles son los patrones de la enfermedad grave", ha defendido.

Calzón también ha añadido que esta nueva vigilancia creará un sistema de información para monitorizar las aguas residuales como "forma complementaria para la vigilancia de la covid". La herramienta será similar al empleado por la Comunidad de Madrid desde el comienzo de la pandemia.

El nuevo sistema de vigilancia de la covid, en proceso

Según lo acordado por las autoridades sanitarias, el nuevo sistema de vigilancia tendrá que garantizar las competencias en la detección rápida del aumento de la incidencia, las nuevas variantes y la efectividad vacunal. Del mismo modo, garantizará una "vigilancia individualizada" en los casos graves, sobre todo, en los entornos vulnerables y de riesgo de exclusión social.

La ministra de Sanidad, Carolina Darias, ha reconocido en la reunión que tienen claro el "cómo" respecto a la nueva herramienta, pero no tanto el "cuándo". Por ello, Darias ha pedido que se realice una propuesta que se presentará en la Comisión de Salud Pública de la próxima semana para "decidir a partir de qué elementos se podría empezar a poner en marcha" en el seguimiento de los casos vulnerables y graves.

Tras la nueva situación en la que los números de la pandemia continúan por una línea descendente, la ministra ha abordado el nuevo modelo de vigilancia de salud pública. La red incluirá el sistema centinela de enfermedades transmisibles, enfermedades no transmisibles, violencia y lesiones, determinantes sociales de la salud e inequidades en salud, e integrará la información procedente de otros sistemas de vigilancia como farmacovigilancia, salud animal, seguridad alimentaria, sanidad ambiental y otros.

El acuerdo recoge la creación de equipos multidisciplinares de profesionales de salud pública en todas las comunidades que desarrollen funciones de vigilancia e intervención en protección de la salud, con una cobertura de "24 horas, siete días a la semana y los 365 días del año".