La segunda sesión del juicio por el Madrid Arena se inicia con nuevas imágenes de las avalanchas

MADRID.- La segunda jornada del juicio por el caso Madrid Arena, en la que el empresario Miguel Ángel Flores presta declaración, ha arrancado con el visionado de unas imágenes de las avalanchas que se produjeron en la noche del 31 de octubre de 2012 en el pabellón municipal. Del mismo modo, se ha mostrado un vídeo de la inspección ocular que se llevó a cabo en el Madrid Arena el 13 de noviembre de 2012.

Unas nuevas imágenes proyectadas en la sala evidencian como en múltiples ocasiones los encargados de seguridad, distinguidos con un chaleco amarillo, tratan de deshacer la montonera tirando de muchos de los jóvenes atrapados.

Inspección ocular

Después de las imágenes de las avalanchas, se ha visto un vídeo de la inspección ocular que hicieron todas las partes personadas en el juicio, el pasado 13 de noviembre de 2012, días después de la tragedia en la que fallecieron cinco jóvenes en el Madrid Arena.

El exjefe de la Policía Municipal, Emilio Monteagudo, a su llegada a la Audiencia Provincial de Madrid para la segunda jornada del juicio por la tragedia del Madrid Arena. EFE/Mariscal

En el último vídeo, aparecen diversos miembros de seguridad andando por los pasillos interiores del pabellón, así como otras imágenes en las que se ve en la madrugada del día 1 de noviembre de 2012 a Francisco del Amo (excoordinador de eventos del departamento de operaciones de Madridec) y a Miguel Ángel Flores, exadministrador de Diviertt S.A., saliendo por un vomitorio del recinto municipal.

Comienzan las declaraciones

El empresario Miguel Ángel Flores declara este miércoles durante la segunda sesión del juicio por el caso Madrid Arena. El abogado de Flores, José Luis Fuertes, ha defendido antes de entrar en la Audiencia Provincial de Madrid que su estrategia de defensa se basará en defender que el pabellón Madrid Arena es "para ese tipo de eventos (fiestas de Hallowen) es mortífero". Ya en su declaración en el juicio, el principal acusado por la tragedia ha admitido que encargó el triple de entrada del aforo y que total de las  vendidas fueron 9.650, esto es, 4.072 más del aforo permitido