La trampa de Sánchez para blindar las fronteras: de regalos multimillonarios a Marruecos a "cárceles de migrantes" en Mauritania

Hace exactamente diez años y siete meses de la muerte de, al menos, 14 personas en la playa de Ceuta. Murieron a causa del uso excesivo de la fuerza y de material antidisturbios que arrojó la Guardia Civil al mar.

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El pasado domingo, muy cerca de esa zona, falleció otra persona, un joven de 20 años que trataba de llegar a Ceuta a nado. Él y otras 30 personas se lanzaron al mar mientras las fuerzas de seguridad marroquíes reprimían un intento de salto de la valla de Ceuta de unas 300 personas.

En pos de frenar la migración, Pedro Sánchez ha estrechado la colaboración con el Gobierno marroquí. Tanto es así que le regala fondos para equipamiento militar. La política migratoria española se basa en la externalización del control migratorio a países africanos como Mauritania, Senegal y Gambia, donde la Guardia Civil española está presente desde hace años.

El fenómeno conocido como "externalización de fronteras" ha permitido que países como Marruecos reciban pagos para contener la migración, pero estos acuerdos esconden un sistema opaco. Los migrantes detenidos en Marruecos son abandonados en zonas remotas, como el desierto, o deportados sin garantías, lo que constituye una explotación de su situación y una estafa a la Unión Europea, que sigue financiando estos operativos.

España y la Unión Europea son cómplices de diferentes violaciones de derechos humanos que se llevan a cabo con financiación española y distintos países africanos. Desvelamos los entresijos de las políticas de externalización de la mano del periodista de investigación José Bautista, en este vídeo.