'Beguinas', una serie sobre la primera ruptura organizada contra el patriarcado
Amaia Aberasturi encabeza el elenco protagonista de una nueva serie original de Antena 3 que se inspira en los beguinatos, unas comunidades de mujeres independientes que, desde el siglo XIII, defendieron una forma de vida alternativa al matrimonio y la Iglesia.
"Nec ancilla nec domina sed socia" ("Ni patrona, ni sierva, sino compañera"), escribió en el siglo XII el teólogo cristiano Hugo de San Víctor. Esta proclama es un legado literario que desarma, en cierta medida, la creencia imperante de que las mujeres no contaban con ningún tipo de libertad en la Edad Media. La mayoría se vieron relegadas a un segundo plano, entre la crianza y las labores del hogar, pero en el XIII surgen las beguinas en Europa. Eran mujeres libres e independientes que no querían ser "ni monjas ni esposas" y vivían en comunidades en las que estaba prohibido el paso a los hombres. Lograron defender su independencia profesional y económica con su labor en huertos y pequeños talleres donde fabricaban telas que después vendían. También copiaban manuscritos y tenían unas inquietudes intelectuales que se vieron frenadas por las denuncias de herejía.
"No hay tanta distancia entre ellas y nosotras", reivindica la actriz Melani Olivares en el South International Series Festival para destacar la contemporaneidad de la serie que ha venido a presentar. Se trata de Beguinas, una serie de ficción histórica producida por Atresmedia TV en colaboración con Buendía Estudios. "La libertad de siempre ha enfadado, ahora también", ha advertido la intérprete que se pone en la piel de Sibila García, una mujer que llega a este refugio después de escapar de la miseria y la prostitución. Su declaración ha servido para introducir el debate sobre si estas comunidades que surgieron en Lieja y Flandes fueron el germen de la primera ruptura organizada contra el patriarcado. "Beguinas se introduce en los orígenes del feminismo y la sororidad", añade Rómulo Aguillaume, codirector de Beguinas, quien ha querido destacar como la formación intelectual de estas mujeres contribuyeron a que comenzaran a adquirir poder durante dos siglos de expansión rápida. Fue precisamente este auge y su falta de sumisión a las altas esferas eclesiásticas lo que provocó su persecución por parte de la Iglesia, incluso algunas fueron quemadas vivas. Uno de los casos más conocidos es el de Margarita Porete, la autora de El espejo de las almas simples, acusada de engatusar a sus confesores y ejercer la brujería.
Regresan las brujas
La actriz Amaia Aberasturi protagoniza esta ficción formada por diez episodios de 50 minutos cada uno. Interpreta a Lucía de Avellaneda, una noble cristiana que ha sido educada para asegurar la posición social y económica de su familia con un matrimonio estratégico. La historia arranca en Segovia, 1559. El personaje de Aberasturi celebra su fiesta de compromiso con el Marqués de Peñarrosa, un noble elegido por su hermano. En medio del festejo, la prometida recibe una misiva inesperada de una mujer que asegura ser su madre y que la reclama en su lecho de muerte. Aquello trastorna su vida por completo. La joven huye a caballo para reunirse con ella en el beguinato y así es como descubre un mundo nuevo que le hará cuestionarse todo lo que había conocido hasta el momento.
Una vez más, Aberasturi regresa al revisionismo histórico con un proyecto en el que la rebeldía de las mujeres toma el centro de la acción. En Akelarre, el largometraje de Pablo Agüero daba vida a una joven de 20 años que es arrestada tras acudir a una fiesta nocturna, acusada de brujería. Esta interpretación le valió nominaciones a la mejor actriz protagonista tanto en los Premios Feriz como en la XXXV edición de los Premios Goya. "Este personaje tiene más luz que el de Ana, que se convierte en el líder de un grupo de mujeres que desafía a la Inquisición. Ella sabe desde el principio que corren peligro y transita por momentos muy oscuros, de incertidumbre y de miedo que solo ella debe asumir. Se siente responsable del final al que se ven abocadas todas", rememora. "Lucía, en cambio, no es rebelde. Lo que ambas tienen en común es que se dan cuenta de la importancia de la sororidad. Estas mujeres se apoyan las unas a las otras, cada una tiene un rol", adelanta Aberasturi.
Un viaje a los orígenes
Uno de los personajes más interesantes que la acompañan en este reparto coral es Nigua, una liberta. La actriz Ella Kweku se adentra en el papel de una esclava antillana que fue vendida a un médico de Sevilla. Antes había aprendido el oficio de partera de su madre y junto a él continuó aprendiendo el funcionamiento del cuerpo humano y botánica hasta que consiguió su carta de libertad. Sin ataduras, viaja hasta un beguinato de Valladolid donde puede ejercer la medicina. "No es un personaje real, pero está muy bien documentado", puntualiza Rómulo Aguillaume. "Descubrimos que había constancia de mujeres de raza negra que habían sido liberadas y que contaban con documentos que acreditaban que ya no pertenecían a nadie. A partir de esa realidad histórica, construimos un personaje que entró por el sur y llegó hasta Segovia. Sabíamos que en España se habían instalado beguinatos tanto en Castilla como en el Reino de Aragón y escogimos esta localización porque era una de las mejor conservadas", desarrolla el codirector de esta serie.
Ella Kweku ha explicado que este personaje le ha dado la oportunidad de empatizar con la dificultad de una mujer en esta época, en especial de una mujer negra. "La esclavitud africana no se toca en los colegios. Yo no sabía que era posible que esto hubiera pasado en nuestro país y, cuando me adentré en el personaje, aprendí que aquí era muy frecuente el uso manilas, unos brazaletes que se usaban en el comercio colonial como moneda y se relacionaba con la compra-venta de esclavos", cuenta la actriz. "Incluso llegué a averiguar que algunos de mis antepasados participaron en ese tráfico de personas. Hubo tribus que vendían a personas de otros clanes como esclavos y mi familia formó parte de eso. He vivido este rodaje como una montaña rusa, con cierto sentimiento de culpa", confesó Kweku ante los medios.
La serie se ha presentado como una historia de amor entre la protagonista y el personaje de Telmo Medina, al que da vida Yon González. Sin embargo, debajo de todos esos ropajes de época se esconde un amalgama de temas ligados a la emancipación de la mujer que no tardarán en aflorar a lo largo de la trama. Los espectadores no tardarán en descubrirlos, ya que en el equipo ha adelantado en el South que llegará a las pantallas en 2024. Inicialmente, estará disponible en la plataforma AtresPlayer y después se emitirá en prime time en Antena 3.