La mayor exposición de Lucian Freud aterriza en el Thyssen

Él, a punto de morir de sida, y ella se quedaron dormidos mientras posaban para Freud. Solía pasar, las sesiones en su estudio eran largas, es lo que tiene querer convertir la pintura en carne. La intimidad, a veces  tierna a veces perturbadora. El último retrato que salió de su pincel fue el de su ayudante, David Dawson. Lo hemos encontrado recorriendo la exposición. Aunque no aparece él tuvo que sujetar al perro que está en la cama y en este otro cuadro sustituir a la modelo Jerry Hall. Ella, nos cuenta, tenía un constipado, Lucian quería terminar estaba nervioso y me dijo ponte tú. Al final sustituyo mi cabeza por la de JerryNo aceptaba encargos, hizo una excepción y se convirtió en amigo del barón Thyssen. Hoy su museo en Madrid, acoge los cuadros de este maestro. Quería mirar y sorprender. Mirar siempre desde otra perspectiva.