Público
Público

"Soy loca con mi Piqué"

Shakira se vuelca con la celebración del Barça en su primer concierto en España

DANIEL GARRÁN

Después de más de una hora de retraso, Why Wait era el tema perfecto para que Shakira empezara a mover las caderas como colofón a la celebración del Barça como ganador de la Champions League.

Con el estadio Olímpico de Lluís Companys de Barcelona medio lleno, la colombiana ofreció la noche del domingo el primero de sus cinco conciertos en España. Esta vez, con un valor añadido: música, fútbol y romance se mezclaban en el escenario para ofrecer un espectáculo digno de telenovela de diccionario. Después de llenar portadas y carpetas, Shakira y Piqué moviendo las caderas juntos para deleite de los fans de la cantante y el defensa, que no son pocos.

La colombiana incluso habló en catalán para presentar al gran reclamo de la noche: los héroes de Wembley. Así, parte de la plantilla del Barça, recién llegados de la celebración en su estadio, acudieron a la llamada de Shakira e intentaron imitar ese movimiento de caderas que ha dado la vuelta al mundo. Piqué, Xavi, Villa, Pedro, Bojan y Busquets se convirtieron en el cuerpo de baile improvisado evidenciando que, afortunadamente, el ritmo de la música no es el que mueve sus pies en el campo.

Tras esta dulce sorpresa, Shakira continuó su concierto con la esperada Inevitable, una versión de Nothing else matters y la castiza Gitana.

Los guiños al victorioso Barça se sucedieron durante toda la noche. Pero aún más frecuentes y, sin duda, más esperadas fueron las referencias al más que aireado amor que comparte con el número tres del equipo blaugrana. De hecho, a modo de folclórica loca de amor, cambió las letras de sus canciones para decir cosas como:  'Gracias al número tres ahora entiendo de fútbol, no pregunten cómo fue pero desde que lo vi cada día sale el sol' o 'Soy loca con mi Piqué'.

Después de la dosis de azúcar de la noche, volvió con un final de fiesta entonando Hips don't lie y el celebérrimo Waka Waka muy acorde con la ocasión bajo una densa nube de confeti.

Un concierto en el que la música pasó a un segundo plano para recibir al Olimpo del fútbol y a la pareja del año. Fútbol y romance. ¿Para qué queremos más?

¿Te ha resultado interesante esta noticia?