'Producciones CMI está al corriente con sus obligaciones tributarias'; 'Nunca se repartieron beneficios producto de su actividad'. Con estas palabras, la productora de La Tuerka se ha defendido este miércoles de las acusaciones de pagar en dinero negro de Enrique Riobóo de La Vega,  propietario de Canal 33, donde durante poco más de tres meses se emitió el programa que co-presentan Pablo Iglesias y Juan Carlos Monedero.

Monedero: '¿Por qué no es portada de El Economista la corrupción cotidiana del PP?'

Primero desde las páginas del diario El Economista, y después ante las cámaras de La Sexta, Riobóo ha acusado a Iglesias  de haberle exigido cobrar en negro.  Para apoyar esta tesis, el diario económico publica un supuesto recibí firmado por la entonces jefa de producción del programa, Sarah Bienzobas -hoy miembro de la directiva de la formación-, por valor de 1.500 euros, sin IVA. 

En esta línea, Riobóo ha hablado con La Sexta con una copia de su libro La cara oculta de Pablo Iglesias en mano; un volumen dedicado a cargar contra el secretario general de Podemos, formación que no existía en 2012, cuando se emitió la supuesta factura que lanza el economista. El propietario de Canal 33 ha llegado a asegurar que pagó a la productora hasta 4.500 euros 'en dinero negro', que tiene documentos que así lo acreditan y que está dispuesto a 'demostrarlo en sede judicial si fuese necesario'.

En su comunicado, Producciones Con Mano Izquierda (CMI) recuerda que Pablo Iglesias nunca estuvo en la presidencia de esta asociación sin ánimo de lucro, y ha remitido a este diario el  documento de la Agencia Tributaria que certifica que están al día con sus obligaciones fiscales, pero no aclara si las facturas presentadas por Riobóo son verdaderas o falsas.

El secretario de Proceso Constituyente y programa de Podemos, Juan Carlos Monedero, ha recordado que las palabras de Ribóo hacen mención a documentos presentados más de un año antes del nacimiento de Podemos, y ha cargado contra la 'doble vara de medir' de medios de comunicación como El Economista. '¿Por qué no es portada de El Economista la corrupción cotidiana del PP?', plantea.

Monedero deja en manos del equipo legal de la formación el estudio de posibles acciones legales contra Riobóo, y recuerda que los hechos que denuncia 'son de hace dos años, pero resulta que los saca cuando quiere vender un libro'.

A juicio del politólogo estas acusaciones se encuadran en la campaña de desprestigio contra el líder del partido y sus más allegados. 'Que acudan a los tribunales: si no lo hacen es porque lo único que les interesa es hacer ruido', zanja.