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La banca busca sortear la ley de las pensiones

La patronal no quiere asumir el coste de 1.500 millones que implica la nueva ley

M. ALBA / V. ZAFRA

Bajo el argumentario de la crisis económica y del difícil futuro del sector, la Asociación Española de Banca (AEB) sólo está dispuesta a un acuerdo de mínimos en el nuevo convenio colectivo del sector que está sobre la mesa de negociación. Todas sus propuestas están marcadas por la senda del recorte para un acuerdo a cuatro años, que propone un incre-mento salarial cero para el primer período (2011-2012) y una subida moderada, sin vinculación al IPC, en los dos últi-mos años. De hecho, el poder adquisitivo de los trabajadores de banca se reducirá, ya que la AEB promueve la supresión del cuarto de paga que se abona en agosto, además de la congelación de las pagas de beneficios, según las condiciones particulares a 31 de diciembre pasado.

Entre la batería de recortes del documento de la patronal, al que ha tenido acceso Público, destaca la negativa de los bancos a incrementar las aportaciones al fondo de pensiones que sería necesario para la jubilación a los 63 años, para aquellos trabajadores que sumen más de 38 años y medio de cotización, que contempla la nueva ley. 'Se trata de mantener el mismo nivel de compromisos asumidos por las entidades del sector, de acuerdo con el marco regulatorio vigente cuando se introdujo esta fórmula de cálculo de los complementos de jubilación para los ingresados antes del 8 de marzo de 1980', explica la AEB para razonar su negativa.

La aplicación de la nueva reforma de las pensiones obligará, como adelantó este diario el pasado 30 de mayo, a elevar en unos 1.500 millones de euros la hucha que tienen constituida los bancos para pagar las pensiones de los empleados (incluidos los prejubilados que aún no están jubilados) que entraron a trabajar antes de 1980. En la actualidad, se encuentran en esta situación unos 50.000 trabajadores.

Otro de los grandes puntosque pretende erradicar la AEB en el nuevo convenio colectivo es el mantenimiento de la antigüedad. 'Es un concepto obsoleto, por lo que debe reconvertirse', cita el texto. De hecho, la patronal propone la supresión de los ascensos por antigüedad y el pago de los trienios. 'La situación actual exige un convenio de adaptación al presente [...]. En estos momentos no se puede determinar los tiempos de recuperación del sector', indica el texto como preámbulo de los recortes. Por contra, la patronal bancaria es expansiva en cuanto a horarios, dejando libertad a cada entidad para poder complementarlos o sustituir a los actuales, y movilidad geográfica. 

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