El pívot estrella de los Magic de Orlando, Dwight Howard, que guió a su equipo al triunfo de 103-90 en el sexto partido de las finales de la Conferencia Este, que ganaron por 4-2 a los Cavaliers de Cleveland, dijo que su equipo fue siempre superior al rival.

"Dominamos de principio a fin en la eliminatoria y estamos en las Finales de la NBA por méritos propios", declaró Howard, que con 40 puntos, 14 rebotes y cuatro asistencias, fue elegido como el Jugador Más Valioso (MVP) de las finales. "No dejamos ninguna duda del equipo que mereció estar en las Finales de la NBA".

Howard, que dijo que "todos" los que dieron ya por "garantizado" duelo entre los Cavaliers, del alero LeBron James, y Los Ángeles Lakers, de Kobe Bryant, recibieron su respuesta en el campo a la falta de respeto hacia su equipo.

"Los partidos y las eliminatorias se ganan en el campo y no con pronósticos interesados y sin conocer de verdad el verdadero potencial como equipo", destacó Howard. "Los que realmente saben de baloncesto conocen que la verdadera competición comienza en la fase final y ahí hemos sido los mejores".

Howard recordó que nadie apostaba por ellos en las semifinales ante los Celtics de Boston, campeones defensores, y lograron la hazaña de eliminarlos con el triunfo en el séptimo partido en el Banknorth Garden.

"Este equipo ha demostrado que puede luchar contra todo y cuando luchamos en el campo siempre tenemos la opción del triunfo", valoró Howard. "Ahora llegamos como víctimas a las Finales y por nosotros perfecto; ya veremos luego lo que sucede".

Howard, que provocó el grito de "¡Beat L.A.! con un mate espectacular cuando faltaban menos de tres minutos para concluir el partido, dijo que estaban listos para el gran reto de los Lakers.

"Sabemos que son los grandes favoritos y que además tienen la ventaja de campo, pero vamos a ver qué sucede", comentó Howard. "De momento, vamos a tener el mismo tiempo de descanso y eso ya es importante para nosotros".

En cuanto a ganar el premio de MVP de las finales de la Conferencia Este, Howard dijo que habían sido todos los compañeros los que hicieron posible la gran victoria y el éxito histórico del equipo que llega a sus segundas Finales de la NBA, las primeras después de 14 años.