El propietario de la Fórmula Uno, Bernie Ecclestone, se ha negado a ofrecer cualquier tipo de descuento a Valmor Sport, empresa organizadora del Gran Premio de Europa, en las tasas ("fee") pactadas el año pasado por la celebración de esta carrera, según explicó en rueda de prensa el vicepresidente de Valmor, Jorge Martínez "Aspar".

Esta tasa o canon que la organización debe pagar al magnate escocés y que asciende a 18 millones de euros fue objeto de renegociación por parte de Valmor Sport en previsión de que la asistencia de público pudiese reducirse debido a la coyuntura económica.

En este sentido, Aspar anunció que Valmor negocia con Ecclestone la posibilidad de crear nuevas líneas de negocio con la licencia de Fórmula Uno, lo cual permitiría a la organización obtener ingresos extraordinarios. "Hay buena disposición", señaló Aspar.

En cuanto a la asistencia prevista, se esperan unas cifras similares a las del año pasado, entre 110.000 y 112.000 personas, sin contar el aforo de la nueva zona general, por la que podrían pasar alrededor de 10.000 personas en total (unas 3.500 por día).

Preguntado por las complicaciones que hubo el año pasado en la venta de entradas, la gran demanda inicial y el agotamiento de las mismas que finalmente no se produjo, Aspar explicó que fue un error negociar con sólo un operador y anunció que este año no se venderán grandes paquetes de entradas sin una garantía económica.

Según las cifras aportadas por Aspar, de todo el público que el año pasado asistió al Gran Premio un veinte por ciento estuvo compuesto por turistas extranjeros, un porcentaje similar por público procedente del resto de España y el resto fueron aficionados valencianos (alrededor del 60 por ciento).

"Ojalá Fernando Alonso empiece el año como lo terminó", señaló Aspar, quien opina que la fecha del Gran Premio de Valencia sería modificada si de él dependiese, para retrasarla a final de año, aunque ha reconocido que la coincidencia con el Gran Premio de Cheste sería un "hándicap".