Este artículo se publicó hace 15 años.
"Me resulta más interesante la gente que está en el lado oscuro"
El actor Hugo Silva estrena esta semana 'Agallas', donde interpreta a un joven que se mete en el mundo del narcotráfico
El actor Hugo Silva estrena el viernes Agallas, un 'thriller' en el que interpreta a Sebas, un buscavidas que intenta escalar en el peligroso mundo del narcotráfico, un tipo de personaje por el que siente un especial interés, según ha asegurado.
"Me resulta mucho más interesante la gente que está en el lado oscuro", ha dicho, tras confesar que cuando leyó el guión de Agallas no tardó nada en aceptar el papel: "El guión me engañaba y eso se agradece mucho, así que me dije a mi mismo: ¡tienes que hacer esta película como sea!'". En el filme, dirigido por Samuel Martín Mateos y Andrés Luque, Silva comparte protagonismo con Carmelo Gómez.
Silva, que se ha confesado fan del cine negro, ha agradecido que la película sea un filme 'de género', alejado de las temáticas sociales características del cine español. "Lo confieso, soy un poco macarra, me encanta Tarantino", ha dicho, además de asegurar que ha visto películas de Al Pacino de los años 70 y 80 para preparar su personaje.
En Agallas el actor madrileño se pone en la piel de Sebas, un joven ladrón de poca monta que descubre en el narcotráfico la herramienta para cumplir sus sueños. "Sebas es un tipo que lo único que hace es sobrevivir en un ambiente hostil desde pequeño."
"Es como un perro callejero con las costillas marcadas por el hambre que no tiene dueño, que además lo que le pasa a Sebas es eso, es un perro que va buscando un dueño, que en la película sería Regueira".
Regueria es el pez gordo que interpreta Carmelo Gómez, un capo sin escrúpulos que en la vida real "tiene una humanidad brutal". "Teníamos que hacer dos personajes que se necesitaran mutuamente, y creo que lo hemos conseguido", ha dicho Silva, y adelanta que se muere de ganas de repetir en una película con él.
Amor por los 'malos'El joven actor se sintió cómodo en el papel de Sebas, dada su predilección por los 'malos': "Prefiero un personaje que tenga que luchar contra sus principios o que directamente no los tenga".
"Estaba un poquito cansado de la televisión. Ahora me apetece alternar cine y teatro, pero por gusto"
Su amor por el personaje le hizo incluso decidirse a la hora de cantar una canción amarga que define las penas de los personajes. "Yo no quería cantar, pero me metí en el estudio y empezamos a jugar y a buscar y cuando me pasaron el resultado vi claro que era el personaje el que cantaba", ha asegurado.
El joven actor, que se dio a conocer en la serie Al salir de clase y ha multiplicado su fama en Los hombres de Paco, ha reconocido que dejar la serie de policías le ha permitido adentrarse en otros proyectos. "Estaba un poquito cansado de la televisión. Ahora me apetece alternar cine y teatro, pero por gusto. No le tengo manía a la televisión", ha recalcado.
Aficionado a series como Perdidos y House --"el Sherlock Holmes de hoy en día"-- Silva asegura que el trabajo en televisión no se valora de la misma forma porque se mete en casa y se ve como algo natural, aunque asevera que "tiene un curro increíble".
El actor ha destacado, sin embargo, la magia del cine y el teatro. "Hay un ritual, un silencio. Estás con mucha más gente, y esa energía llega al escenario. El público es el último actor. Cuando el público no está a favor de la obra actuar es mucho más difícil. En cambio, desde el punto de vista del espectador la tele es comida rápida".
Tras estrenar este año Mentiras y gordas y compartir escenario con Blanca Portillo en Hamlet, Silva acaba de terminar el rodaje de Que se mueran los feos, una "comedia rural" en la que también participan Javier Cámara y Carmen Machi. "En realidad hay comedias románticas que también me dejan muy buen sabor de boca", ha confesado.
Comentarios de nuestros suscriptores/as
¿Quieres comentar?Para ver los comentarios de nuestros suscriptores y suscriptoras, primero tienes que iniciar sesión o registrarte.