Público
Público

Mueren 6 civiles afganos en un ataque de la OTAN, según testigos

Reuters

Un ataque aéreo nocturno liderado por la OTAN en una remota aldea de Afganistán causó la muerte a seis civiles, entre ellos dos niños, dijeron el lunes responsables afganos, pero las fuerzas occidentales afirmaron que tenían como objetivo unos integristas armados.

el contingente de la OTAN en el país.

En algunos casos, las tropas occidentales y estadounidenses han rebatido inicialmente las noticias sobre las muertes de civiles, para luego admitirlas y disculparse.

El ataque ocurrió en un distrito remoto de la boscosa y escarpada provincia de Kunar, que limita con Pakistán y proporciona un refugio ideal para los insurgentes que luchan contra el Gobierno de Kabul, apoyado por Occidente.

La Fuerza Internacional de Asistencia para la Seguridad (ISAF, por sus siglas en inglés), dijo que pidió apoyo aéreo tras seguir a un grupo de combatientes hostiles hasta un lugar donde no vieron evidencia de presencia civil.

"Múltiples fuentes de inteligencia dieron una identificación positiva de entre cuatro a ocho insurgentes reunidos en una conocida área enemiga (...) La información interceptada de los servicios secretos indicó el intento hostil del enemigo para atacar", señaló en un comunicado.

Sin embargo, planeaba reunirse con líderes locales para una investigación conjunta sobre el incidente, y lamentó "cualquier posible víctima civil", agregó la declaración.

DURANTE LA CENA

El jefe de policía del distrito, Mirza Mohammad, declaró que seis personas perdieron la vida, todos civiles, incluyendo una niña de tres años, un menor de 10 y un hombre de 40 años. Otras 16 personas, entre ellos 16 niños, resultaron heridas, y el menor de ellos era un bebé de un año. Tres viviendas quedaron destruidas, indicó.

"Estábamos cenando cuando ocurrió el ataque", dijo a Reuters por teléfono un habitante del distrito de Wata Pur, que agregó que todos los muertos eran civiles.

"Estoy al tanto del bombardeo y del martirio y de los heridos civiles", declaró a Reuters el gobernador de la provincia de Kunar, Fazlulah Wahidi, sin dar cifras.

La semana pasada, cinco personas, entre ellas un bebé de siete días, murieron durante una operación liderada por Estados Unidos en la provincia suroriental de Jost.

Las fuerzas estadounidenses inicialmente dijeron que habían matado a cuatro insurgentes, pero más tarde admitieron que las víctimas mortales eran todos civiles que defendían su casa.

El número de civiles muertos en operaciones de las tropas occidentales ha ido aumentando progresivamente, y el año pasado llegó a varios centenares, según grupos de defensa de los derechos humanos y el Gobierno.

La OTAN y EEUU defienden que los insurgentes son los responsables de la mayor parte de las muertes de civiles, pero admiten que las muertes que han causado les han costado el apoyo de la población.

¿Te ha resultado interesante esta noticia?

Más noticias