Juan Soler, accionista mayoritario del Valencia, comunicó hoy el cese de Juan Villalonga como gestor del club y anunció que ha suscrito una opción de venta de sus acciones por el mismo importe que él pagó por ellas con Vicente Soriano, segundo máximo accionista, quien tiene delegados los "poderes políticos" de la misma.

Soler anunció su decisión en una rueda de prensa en la que arremetió duramente contra Villalonga, a quien acusó de "demagogo" y de "mentir" sobre la situación económica del Valencia, poco después de que el ex presidente de Telefónica comunicara que dispone de quince días para cumplir un "acuerdo verbal" alcanzado con Soler para adquirir sus títulos por 76,7 millones de euros.

"No tenemos ninguna duda de que esto va a salir adelante y, como quiero demostrar que la unión entre accionistas es total y que no quiero ganar ni un euro, he llegado a acuerdo con Vicente Soriano y hemos firmado opción de venta de mis acciones", afirmó Soler.

Tras anunciar su acuerdo con Soriano, Soler indicó que éste tendrá "la palabra" en la reunión del consejo de administración que se celebrará mañana y garantizó que contará con todo su apoyo "para lo que le haga falta".

Soler, a quien también acompañó el accionista y actual consejero Vicente Silla, aseguró que tanto ellos dos como Soriano están de acuerdo en que "no hay derecho a la imagen que este club ha dado a Europa", tras lo cual acusó a Villalonga de ser un "mago" que ha hecho que "desaparezca" el respeto hacia el Valencia.

"Nunca he dicho nada que no se haya podido cumplir y nunca he faltado a mi palabra, pero no voy a permitir que una persona que no se ha ido, sino que la he traído yo y que se ha llevado bastantes euros, venga aquí a decirnos lo que tenemos que hacer; que se lo diga a los accionistas de Terra y Telefónica a ver lo que opinan", lanzó Soler.

El ex presidente del Valencia, dijo que quería aclarar algunas de las cosas que Villalonga manifestó en su intervención y aseguró que el consejo de administración del club ya era consciente de que las cuentas del club "no son boyantes" y que los datos de Villalonga sobre la deuda del club son "totalmente falsos".

Soler aseguró que "hay solución" para resolver los problemas económicos del club, pero indicó que "sólo hace falta ganas y trabajo" para encontrarlas "y no cobrar por ello".

En este sentido, anunció que posee una "oferta en firme para comprar los terrenos del actual Mestalla por 300 millones de euros".

Además, manifestó que se sentía "orgulloso" de no haber vendido nunca a ninguna de las "figuras" del equipo en los cuatro años que lleva al frente de la entidad.

"Villalonga es un gran gestor; vino y, en las primeras conversaciones que tuvo conmigo y con Soriano, nos hablaba de que tenía recursos para traer y el único recurso ha sido una ampliación de capital que iba a perjudicar al bolsillo de los accionistas", señaló Soler.

A su juicio, con esta operación, el Valencia iba a pasar "a manos de los amigos de Villalonga" algo que Soler indicó que no iba "a consentir".

"A Villalonga le digo que yo (el dinero) lo he puesto siempre, con el aval de fichajes o con el aval de la primera torre de la parcela de Mestalla y lo volvería a hacer, pero él ha venido a llevarse el dinero", afirmó.

Soler señaló que "es cierto" que llegó a un acuerdo con Villalonga para la venta de sus acciones "por 71,7 millones y no 76,7 como se ha querido confundir", pero comentó que el empresario le transmitió que "tenía dificultades para hacer frente a esa operación".

"Ese documento no se ha llegado a firmar porque lo que yo le pedía a Villalonga es sólo un millón de euros y el resto en cuatro años. Si sólo tiene que poner un millón, ¿donde esta el dinero que los inversores extranjeros iban a poner?", se preguntó Soler.

El todavía máximo accionista insistió en que nunca ganará "un sólo euro con el Valencia" porque no ha venido "a lucrarse" y dijo que, en sus dos semanas en el club, Villalonga no le ha "demostrado nada".

"Lleva pocos días en el Valencia y hemos sido el hazmerreír", dijo Soler, quien recordó que el Valencia fue el único club de Primera sin representación institucional en el reciente sorteo del calendario de la próxima temporada.

"Es cierto que el Valencia necesita un medico, no un mago", añadió Soler, quien consideró que, tras el cese de Villalonga, el Valencia "tiene que recuperar su imagen".