La pintura a la tiza, también conocida como chalk paint, resulta tan especial como característica, ya que deja un efecto aterciopelado y mate que da a los objetos un aspecto único. Sirve además para crear la apariencia de muebles antiguos y dar nueva vida a elementos decorativos. El único límite lo pondrá tu imaginación.
Nosotros te damos algunas ideas sencillas con pintura a la tiza para renovar tu casa esta primavera-verano que seguro que te sorprenden. Pero ya te advertimos que, si te encanta el resultado, terminarás queriendo usar esta pintura al agua para todo. Una vez que se incluye en los proyectos DIY, siempre termina teniéndose en cuenta.
Pintar un mueble viejo
Una de las opciones más frecuentes para dar un cambio enorme a un mueble es utilizar chalk paint. Y es que darle una mano de pintura a un viejo aparador, una mesa auxiliar o una cajonera con esta pintura siempre da un resultado espectacular.
Para restaurar un mueble con pintura a la tiza, primero has de limpiar muy bien la superficie a pintar y luego solo has de aplicar la pintura del color elegido.
Lo mejor es seleccionar un tono que haga juego con el resto de la habitación y dar un toque de color a la estancia. Una vez pintado solo tienes que encerarlo para que el acabado se vea más perfecto y duradero.
Envejecer un mueble
Si ya has probado esta pintura, puedes animarte a lograr uno de los efectos estrella que se consigue con ella. Nos referimos al aspecto envejecido de un mueble o una silla. Con esta pintura puedes conseguir que se vea como una pieza con gran historia a sus espaldas, hermosa y única.
Para ello necesitarás dos tonos de pintura a la tiza: uno que funcionará como base y otro que se echará por encima. De tal forma, cuando desgastes las zonas que desees, lijándolo con suavidad, para simular los arañazos o zonas desgastadas del mueble, la pintura de abajo se revelará y se conseguirá el efecto deseado. Obtendrás una pieza vintage espectacular y completamente irrepetible.
Decorar una cómoda con estarcido
Otra opción al pintar el mueble es usar la técnica del estarcido para crear en su superficie cenefas o algún tipo de dibujo decorativo. Para ello necesitarás la plantilla para realizar el dibujo y dos colores distintos de pintura a la tiza: el que cubrirá la mayor parte de la superficie y el que utilizarás para marcar algún motivo especial.
El efecto es espectacular si pintas el mueble en blanco y realizas el estarcido en un tono tierra o grisáceo, negro o azul marino, según quieras obtener un estilo más natural, más elegante o más marinero. Elijas el que elijas, ten en cuenta dónde vas a colocar el mueble para que combine con el resto de la estancia.
Pintar las sillas
Al igual que los muebles de madera, puedes pintar las mecedoras y las sillas de este material, pero también las sillas o banquetas de metal que tienes en casa. Tendrán una nueva vida con una buena capa de pintura a la tiza. Limpia bien la superficie o líjala y prepárala antes si está muy deteriorada para poder aplicar la pintura. Luego, pinta con un pincel suave y, cuando esté seca, termina con una capa más de barniz al agua para protegerla.
Tanto en este caso como en los otros, asegúrate de que la pintura a la tiza que has elegido vale para la superficie que vas a pintar, ya que la encontrarás a la venta disponible para cada tipo de material. Selecciona la adecuada para que el resultado sea perfecto.
Pintar las puertas de los armarios
En vez de pintar todo un mueble, si te parece demasiado farragoso o quieres un cambio notable pero en cierta forma sutil, puedes optar por decorar solo la puerta de aparadores o armarios. Haz que las puertas de tus armarios sean únicas con pintura a la tiza. También puedes añadir en las esquinas alguna cenefa con la técnica del estarcido. De esta forma es muy fácil crear una aspecto elegante o romántico. El secreto: elegir bien el color.
Pintar tarros y macetas
Si quieres reciclar tarros de cristal para convertirlos en bellos jarrones que puedes usar para decorar como un conjunto de diversos tamaños, no dudes en usar chalk paint. Pinta los frascos de vidrio con él y realiza un bello centro de mesa o un único jarrón para las flores.
También puedes aprovechar la pintura para coordinar todas las macetas de tu casa o darles una nueva vida si su aspecto está desgastado. Por supuesto, si lo deseas, puedes pintarlas en varios tonos con rayas o topos. Deja volar tu imaginación y descubre las maravillas de la pintura a la tiza.
