Cargando...

Un nuevo tipo de células madre abre la puerta al desarrollo de órganos de reemplazo

Este hallazgo supone la superación de un obstáculo importante de cara a conseguir, en un futuro, el crecimiento de órganos para humanos.

Publicidad

En esta imagen, un nuevo tipo de células madre humanas se muestra en verde e integra el desarrollo en las células circundantes de un embrión de ratón inviable. El color rojo indica células de linaje endodermo. / Salk Institute

Incluso para las personas que no necesitan un trasplante inmediato, enfermedades crónicas que afecten a los órganos pueden causar problemas que podrían evitarse mediante la sustitución del órgano dañado o enfermo. Por ejemplo, en las personas con diabetes, la dificultad de la gestión de los niveles de insulina y de azúcar en la sangre puede llegar a provocar ceguera o la pérdida de extremidades. Pero, aparte de la baja disponibilidad de órganos por la falta de donantes, existe el riesgo de que el sistema inmune del receptor rechace el nuevo órgano.

Publicidad

En este trabajo los investigadores han encontrado un tipo de células madre que se caracterizan por su localización en el embrión

Click to enlarge
A fallback.

La diferencia más prometedora entre estas células orientadas en el espacio, llamadas rsPSCs (por sus siglas en inglés), y las células madre tradicionales es su capacidad para formar una quimera humano-ratón, una combinación de células a partir de las dos especies. La capacidad de hacer crecer en tejidos humanos en otras especies –probablemente en cerdos- podría conducir a la creación de órganos de reemplazo para aquellos dañados por una lesión o enfermedad.

Ofrecen una nueva esperanza para el cultivo de tejidos y órganos humanos en un animal huésped

Publicidad


Gracias a estos avances, los investigadores pueden ahora tomar células de la piel de una persona, transformarlas en células madre y luego convencerlas para convertirse células específicas de un tejido distinto, tales como las del cerebro, el músculo o el páncreas. Debido a que las células tienen el mismo ADN que la célula original de la piel, los tejidos nuevos, en teoría, serían aceptados si se les devuelve al cuerpo como un órgano de reemplazo.

Un cóctel de señales químicas

Publicidad

"Cuando se han intentado trasplantar tejidos animales en humanos, la incompatibilidad entre ellos ha llevado al rechazo", señala Izpisúa-Belmonte

Así, los resultados no solo proporcionan una nueva forma de estudiar el desarrollo humano temprano, sino que también ofrecen una nueva esperanza para el cultivo de tejidos y órganos humanos en un animal huésped.

Publicidad