La Fundación Academia del Cine ha rendido homenaje este lunes a la escritora Almudena Grandes en el Teatro María Guerrero de Madrid, a punto de cumplirse un año de su fallecimiento (27 de noviembre). Las actrices Carmen Machi, Blanca Portillo, Susi Sánchez, Aitana Sánchez Gijón y los actores Juan Diego Botto y José Sacristán interpretaron algunos fragmentos de las novelas que componen los personajes de los Episodios de una Guerra Interminable. El toque musical del homenaje corrió a cargo de la pianista Rosa Torres-Pardo.

Al acto asistieron personajes del mundo del cine y de la música como Víctor Manuel, Ana Belén, Pedro Almodóvar o Gerardo Herrero, que ha dirigido o producido varias adaptaciones de novelas de la escritora madrileña. También estuvieron presentes algunas figuras políticas como la vicepresidenta segunda del Gobierno, Yolanda Díaz, el ministro de Cultura y Deporte, Miquel Iceta, y la ministra de Educación, Pilar Alegría.

Fernando Méndez-Leite, presidente de la Academia de Cine, recordó durante el acto que la escritora madrileña era "patrona de honor de su Fundación", según recoge EFE. También repasó algunas de las películas realizadas a partir de sus novelas, empezando por Las edades de Lulú (1990), de Bigas Luna, única en la que colaboró en la escritura del guion y por la que ambos fueron nominados al Goya.

Lecturas de fragmentos

La lectura de fragmentos de las novelas que componen los personajes de los Episodios de una Guerra Interminable, inspiradas en los Episodios nacionales de Benito Pérez Galdós, sobre la guerra civil y la posguerra españolas, comenzó con la recreación de dos escenas de Inés y la alegría, interpretadas por Juan Diego Botto y Aitana Sánchez Gijón.

Carmen Machi leyó El lector de Julio Verne, Susi Sánchez se encargó de Las tres bodas de Manolita, José Sacristán de Los pacientes del doctor García y, por último, Blanca Portillo interpretó La madre de Frankestein.

Estas figuras del cine estuvieron acompañadas al piano por Rosa Torres Pardo y por algunas grabaciones de vídeo en las que la propia Grandes resumía el contenido de cada una de las novelas.

El escritor y viudo de Grandes Luis García Montero cerró el acto leyendo un poema de Luis Cernuda titulado 1936, que forma parte del libro Desolación de la quimera y que apela a la nobleza humana.