La próxima película de Woody Allen empezará su rodaje el próximo verano. En esta ocasión ha escogido Roma como escenario para su nuevo proyecto cinematográfico, según explica el director neoyorquino en una entrevista publicada este lunes en el diario italiano La Reppubblica. 

Por el momento, no ha querido desvelar la trama de la película así como tampoco a sus protagonistas, según él por temas supersticiosos, aunque lo que si aseguró fue que tiene muchas ganas de pasar una temporada con su familia en la capital italiana. 'Todavía estoy en la fase de escribir el guión, sería absurdo anticipar algo', comentó.

Hasta el momento, Allen aterrizará en Roma al menos una vez antes del inicio del rodaje junto a la New Orleans Jazz Band, con la que dará un concierto en el Auditorium de la capital romana el próximo 26 de marzo. En éste el cineasta tocará el clarinete, su gran pasión.

En la entrevista se atreve a bromear sobre su talento con ese instrumento: 'El único motivo por el que toco con la New Orleans Jazz Band es porque me divierto mucho al hacerlo', y añadió: 'Soy un paquete, un 'amateur', un mediocre con falta de oído y de talento. Moriría de hambre si tuviese que trabajar como músico si no hubiera adquirido una cierta celebridad como director antes'.

Las últimas producciones de Allen se han caracterizado por escoger algunas de las ciudades más importantes a nivel europeo para trasladar sus personajes y contarnos sus historias. Ahora Roma se suma a la cuarta ciudad del viejo continente que sirve de inspiración escenográfica al cineasta, precedida por Barcelona (Vicky Cristina Barcelona), Londres (Match Point) y París (Midnight in Paris).

Precisamente, Allen también ha hablado sobre la apertura del próximo Festival de Cannes con su filme Midnight in Paris. El actor y director se confiesa un enamorado de la capital francesa y manifiesta que ha tenido una larga historia de amor con ella, motivo por el que ha querido demostrarle toda su pasión con esta cinta.