Con el fuelle europeo

Acude el Athletic al Camp Nou cuando los ecos del fabuloso partido que el Barcelona disputó ante el Arsenal aún resuenan, y la parroquia azulgrana da vueltas a un empate que, por juego y ocasiones, mereció mejor premio. Aguardan todos, expectantes, la vuelta de los cuartos de la competición europea, pero la Liga pide paso para dirimir el último duelo antes de que el Barça acuda al Bernabéu para disputar el clásico acaso más determinante de los últimos años. Está tan apretado el pulso por la competición doméstica que a los aspirantes no les queda ni el más mínimo resquicio para el error.

Gato viejo en el oficio pese a su juventud, Pep Guardiola contemporiza. No quiere el técnico del Barça cuentas de la lechera, ni expectativas desmesuradas respecto al juego, ni que el partido contra el Madrid sea la cuestión más reiterada, cuando por el Camp Nou tienen que pasar antes Athletic y Arsenal. "El partido del Bernabéu es el menos importante de todos los de la Liga. Yo prefiero este [el del Athletic] y los siete siguientes", aseveró ayer el preparador azulgrana, antes de corregirse. "Claro que el partido del Bernabéu es importante, pero queda lejísimos y, si perdemos allí pero ganamos todos los demás, tenemos grandes posibilidades de ganar la Liga", matizó Guardiola.

Pep: "El partido del Bernabéu es el menos importante de todos"

Tremendamente satisfecho con el juego desplegado ante el Arsenal, esa "clase magistral de fútbol" que estos días elogia la prensa inglesa, el técnico azulgrana teme que las expectativas se disparen y la concentración de sus jugadores se disperse ante el Athletic, "un equipo al que, o se le juega muy concentrado, o no se le gana".

La experiencia lo dice: es la cuarta vez que se enfrentan este curso. "Que nadie espere un partido como el de Londres", advirtió Guardiola. "No se repetirá. Tener 15 minutos con 11 disparos a puerta es muy difícil. Eso sucede una vez en la vida", argumentó.

Descartado un nuevo espectáculo, el técnico del Barça aspira a centrar la concentración de sus jugadores en el encuentro de hoy "ésa es mi responsabilidad" para que éstos mantengan, a su vez, el comportamiento exhibido ante el Arsenal. "Ése es el objetivo, tener una circulación de balón similar a la de Londres, cosa que este año nos ha costado", apuntó Guardiola. "Allí dimos un paso adelante en muchos aspectos, pero también en Mallorca, donde hicimos un partido brutal, extraordinario", reivindicó.

"Una derrota ahora penalizaría mucho; no miremos más allá", advierte

Apoyado en las evidencias, el discurso del técnico ha reforzado las convicciones de sus pupilos. "Si seguimos esta línea, perderemos muy pocos puntos y muy pocos partidos", aseveró Puyol. "Si nosotros hacemos más de 90 puntos y el Madrid gana la Liga, sólo podré levantarme y aplaudirle", intervino el técnico catalán. "El partido de Londres nos dio confianza y nos indicó el camino que tenemos que seguir", prosiguió el capitán del Barça.

La resaca europea es hoy menos temida en el Camp Nou. El Barça, que no ha perdido este curso ninguno de los encuentros que ha sucedido a la Liga de Campeones, pretende rentabilizarla. "Hemos llegado a un momento clave, nos lo jugamos todo y sabemos que tenemos que salir así en todos los partidos, no sólo en Europa", concluyó Puyol, convencido de que, ante el Arsenal, disputó uno de los mejores partidos de su carrera.

A 29 puntos del Barça, el Athletic aspira a amarrar su sexta posición y ascender hacia la élite europea. "Ellos juegan mucho al fútbol, habrá que entrarles duro; no querrán ese tipo de partido", advirtió Amorebieta. "Eso no es una novedad para nosotros", replicó Guardiola. "Tendremos que mover muy rápido el balón, estar muy cerca de ellos para evitar las líneas de pase e ir con mucha intensidad y agresividad a las presiones", recetó el técnico.