La selección inglesa busca hoy en Montenegro el punto que le falta para sellar su clasificación para la Eurocopa 2012. El partido, penúltimo para la selección local y último del grupo G para Inglaterra, también es vital para los montenegrinos, que ganando pueden incluso optar aún a la primera plaza.

La concentración inglesa fue sacudida por la noticia de la detención del padre y el tío de Rooney por su supuesta implicación en actividades para amañar apuestas deportivas. Según informó la BBC, la policía arrestó a nueve individuos, uno de ello Jennings, futbolista del Motherwell escocés.

En el grupo H, Portugal está obligada a ganar en Oporto a Islandia para afrontar con confianza su verdadera final, el martes frente a Dinamarca en el Parken Stadion de Copenhague. Paulo Bento, seleccionador luso, espera contar con Cristiano, quien ayer se entrenó con normalidad tras superar unas molestias.

Los problemas habitan en la retaguardia, debido a las ausencias de tres de sus cuatro titulares, todo ellos madridistas Pepe, Coentrao ambos por lesión y Carvalho. El caso de este último continúa alimentando la polémica después de que el central abandonara la última concentración por desavenencias con su entrenador, motivadas al parecer por su suplencia. El defensa blanco pidió disculpas por su actitud y aseguró que está listo para ser llamado de nuevo, aunque por el momento Paulo Bento ha desoído su ofrecimiento.

Al igual que la portuguesa, la selección serbia también está obligada a vencer a Italia en Belgrado para acceder a la repesca. El encuentro está marcado por lo sucedido en el primera partido, disputado en octubre de 2010 en Génova, cuando la UEFA declaró ganadora a Italia por 3-0 después de que el choque quedase suspendido a los siete minutos por incidentes violentos protagonizados por los hinchas radicales serbios. La Policía anunció que impedirá cualquier intento de acceso de los implicados en esos incidentes.

Por su parte, Turquía buscará asegurar el segundo lugar del grupo A en un partido en casa ante Alemania, ya clasificada. El holandés Guus Hidink, entrenador de la selección otomana, calcula que necesita al menos cuatro puntos en los dos partidos pendientes, toda vez que Bélgica, tercera, tiene dos menos que los turcos. Aun así, los belgas no desisten. Pretenden ganar hoy a Uzbekistán y esperar.