Parlamento EuropeoEl fútbol femenino español reclama más visibilidad e igualdad en la Eurocámara

Si las estrellas de la liga femenina como Alexia Putellas y Jennifer Hermoso salieran en la televisión tanto como Messi o Benzema, el deporte femenino estaría un paso más cerca de la igualdad. Así que más visibilidad es precisamente lo que han pedido la media docena de representantes del fútbol femenino español que han viajado a Bruselas este martes para exigir en el Parlamento Europeo que se les trate igual que a los hombres. También en el fútbol de masas.

Las futbolistas han participado en un encuentro al que han acudido alrededor de una cincuentena de personas. La delegación de representantes del fútbol femenino español ha estado compuesta por jugadoras de la primera división de fútbol y fútbol sala, entrenadoras, árbitras, y una responsable de la RFEF. Además de pedir más visibilidad, han demandado más igualdad en el fútbol de élite en España en general. Un ejemplo: en la primera división solo hay dos entrenadoras que sean mujeres.

"Necesitamos gente que apueste por nosotras", ha resumido Ana Sevilla Luján, capitana de la selección española de fútbol sala, antes del inicio de la reunión. Y para esto, el tiempo que se le dedica a las mujeres en los medios de comunicación es clave. Solo con más visibilidad, ha explicado la futbolista, podrán conseguir el apoyo de "empresas y patrocinios importantes", de manera que las condiciones de las futbolistas puedan acercarse a las de los hombres.

Precisamente este miércoles se prevé que se firme el primer convenio de fútbol femenino por el que las jugadoras de la primera división cobrarán un salario mínimo de 16.000 euros brutos anuales. Gracias en parte a una huelga en la jornada 9 secundada por todos los equipos. Rubricarán el acuerdo la patronal Asociación de Clubes de Fútbol Femenino (ACFF) y los sindicatos (AFE, Futbolistas ON y UGT).

Esta victoria de las futbolistas llega después de que Mediapro haya adquirido los derechos televisivos de la Copa de la Reina y para explotar ciertos espacios de publicidad en los estadios por los que pagará 1,1 millón de euros al año. Un convenio que Pagazaurtundúa ha calificado de "histórico para España y para Europa". 

Los problemas del fútbol femenino no se quedan en las élites. El eurodiputado Juan Fernando López Aguilar (PSOE) ha destacado que de manera general las mujeres practican menos deporte que los hombres, y que eso es un problema a la hora de promover un estilo de vida saludable. La FIFA ha lanzado una campaña en este sentido, con la que se propone llegar a los 60 millones de licencias femeninas para 2026.

La Comisión Europea ha apoyado el mensaje de las futbolistas: "El deporte por definición tiene que estar abierto a todo el mundo", ha dicho el jefe de la unidad de deportes del Ejecutivo comunitario, Yves Le Lostecque. "También el interés económico del deporte tiene que ser accesible".

Todavía falta mucho por hacer

A pesar de que las futbolistas ven que hay un avance hacia la equiparación con los hombres, algunas ponentes han denunciado situaciones discriminatorias que han vivido en el mundo del deporte. Una de ellas ha sido Elena Fernández, entrenadora de porteras del Atlético de Madrid femenino, y que antes trabajó también en el equipo de Segunda B masculino de los colchoneros".

En una ocasión un club -no ha citado el nombre- que necesitaba una entrenadora para porteros la rechazó "porque consideraba que le podía ocasionar problemas el vestuario", ha relatado Fernández. "Desgraciadamente, esta es la mentalidad que sigue existiendo".

La concejala de Deportes de Galapagar (Madrid), Mercedes Nuño (Cs), ha contado cómo de pequeña no pudo jugar a fútbol en la escuela porque no se le ofertaba a las niñas. En su lugar, las elecciones que tenía eran el baloncesto o bailar jota.

Por su parte, Sara Tui, futbolista del Madrid CFF de primera división, ha denunciado las "siete diferencias" que se ven entre cualquier partido de fútbol masculino y femenino. "Desde el número de cámaras hasta el presupuesto", ha resumido Tui en un discurso que ha terminado emocionada. "Si no tenemos visibilidad, no existimos".