Las dependientas de Inditex mantienen la huelga hasta estudiar el acuerdo de la empresa con CCOO y UGT

Las dependientas de Inditex mantienen la huelga convocada por la Confederación General del Trabajo (CGT) para el próximo domingo, 12 de febrero, a la espera de analizar el acuerdo al que llegaron la pasada noche UGT y CCOO con la dirección de la empresa.

La CGT es el sindicato mayoritario en el comité de empresa de las tiendas de Inditex en Madrid, y fuentes de la central han asegurado a Público que de momento sólo conocen del acuerdo lo que han desvelado UGT y CCOO y la propia compañía a través de su Intranet para empleados.

"Hasta que no tengamos y contrastemos la información con la empresa y los abogados y nos aclaren las cantidades y el tema de las pagas, los domingos, etcétera, la huelga sigue en pie", indicaron esas fuentes.

Las trabajadoras de Inditex  en Madrid y en otras ciudades, provincias y comunidades españolas empezaron a movilizarse hace semanas después de que sus compañeras de A Coruña, donde la compañía tiene su sede, iniciaran una serie de huelgas, manifestaciones y protestas en demanda de mejoras salariales y laborales.

Como sucede en Madrid, en A Coruña UGT y CCOO son minoritarios, y las dependientas, en su mayoría afiliadas a la Confederación Intersindical Galega (CIG), rechazaron el acuerdo al que habían llegado aquellas centrales, y lograron finalmente mejoras superiores a las que éstas habían conseguido.

El pacto alcanzado el pasado jueves para las tiendas de toda España contempla un salario mínimo de 18.000 euros para las empleadas con menos de 18 meses de antigüedad en la empresa; de 20.000 euros para las que llevan entre 18 y 48 meses y de 22.000 para las que superan ese plazo. Las encargadas cobrarán un mínimo de 24.500 euros. Todas esas cantidades se devengarán con carácter retroactivo desde el pasado 1 de enero.

Más del 90% de la plantilla de dependientas de Inditex son mujeres, las que cobran los peores sueldos en la empresa propiedad de Amancio Ortega y que dirige su hija Marta Ortega. Además de tener peores condiciones laborales, sus contratos son mayoritariamente de jornada reducida, y no gozan de las mismas ventajas sociales y de estabilidad que en otros departamentos donde los hombres son mayoría.

Inditex obtuvo más de 3.000 millones de euros en beneficios netos en los nueve primeros meses del año pasado.