Las fuerzas de seguridad israelíes agreden con porras a los portadores del féretro de la periodista Shireen Abu Akleh

Las fuerzas de seguridad israelíes han golpeado a los portadores del féretro con los restos mortales de la periodista palestina-estadounidense Shireen Abu Akleh nada más sacar el ataúd del Hospital Francés de San Luis, en Jerusalén, para su recorrido final por la ciudad.

Las imágenes captadas por la cadena Al Yazira, donde trabajaba la fallecida, muestran cómo un grupo de agentes israelíes se aproxima a los portadores del féretro, a los que empiezan a agredir con porras hasta el punto de que el ataúd está a punto de caer al suelo.

Fuentes israelíes argumentan que los portadores incumplieron las condiciones para la celebración del funeral al intentar trasladar el ataúd a pie por la ciudad en lugar de los vehículos permitidos por las fuerzas de seguridad israelíes.

Finalmente, el féretro de la periodista ha sido trasladado en coche fúnebre hasta la Catedral de la Anunciación de la Virgen, en Jerusalén Este, según Al Yazira.

Shireen Abu Akleh murió tras recibir un disparo en la cabeza en el campo de refugiados de Yenín, al norte de la Cisjordania ocupada, mientras cubría una operación del Ejército israelí. La cadena de televisión catarí culpa a los soldados de Israel de "asesinar a sangre fría" a su corresponsal. Una versión defendida  por otros periodistas independientes que se encontraban en el lugar.

Mientras, desde Tel Aviv se trata de culpar a milicianos palestinos pese a la versión de los testigos. En España, la ministra de Derechos Sociales y Agenda 2030, Ione Belarra, ha pedido al Ministerio de Exteriores una condena más firme del asesinato y que apunte a Israel como su autor.