En la Ciudad de Gaza, una madre escribe un mensaje a la ONG que ha acompañado a su familia todo este tiempo. Lo envía y espera. No sabe si llegará, ni cuándo. Puede tardar horas, incluso días. Desde el miércoles, gran parte de la Franja vive sumida en un apagón de telecomunicaciones. Las imágenes que llegaban desde hospitales, escuelas convertidas en refugios o calles arrasadas por las bombas ahora no circulan. Los testimonios de quienes sobreviven bajo las bombas se diluyen en la imposibilidad de contar su historia.

"El objetivo es que no llegue información afuera de lo que está haciendo el Ejército israelí en la Franja", denuncia la Fundación Comité de Apoyo al Pueblo Palestino en declaraciones a Público. Para las organizaciones humanitarias, cortar internet y telefonía es una forma más de guerra, un arma que deja incomunicada a la población justo cuando más necesita ser escuchada. Durante estos apagones, la población gazatí no puede buscar ayuda, acceder a servicios de salvamento ni averiguar si sus familiares y seres queridos están sanos y salvos.

Amnistía Internacional denuncia en un comunicado que el corte de las redes de telefonía e internet en Gaza tiene consecuencias letales para la población. Según la organización, estas interrupciones "impiden que se puedan salvar a personas heridas o atrapadas bajo los escombros" y bloquean el acceso a información vital, como "encontrar áreas seguras o contactar con servicios de emergencia". Además, el apagón puede "encubrir la persistencia de graves violaciones del derecho internacional y facilitar la impunidad por la comisión de crímenes".

Solo unos pocos gazatíes, aquellos que logran conectarse a través de una tarjeta e-SIM internacional, consiguen hablar con el exterior y alertan de que los tanques israelíes se están desplegando en la ciudad de Gaza este jueves. "La desconexión de los servicios de internet y teléfono son un mal presagio. Siempre ha sido una mala señal de que algo muy brutal va a ocurrir", señalaba Ismail quien consiguió contactar de este modo desde la capital gazatí este jueves, según recoge Reuters.

En los conflictos actuales la conectividad también es utilizada como un arma de guerra. Cortar internet no solo aísla a la población, también impide que las violaciones de derechos humanos puedan documentarse en tiempo real. "Es una manera más de tener incomunicadas a las personas, una forma más de guerra. Si cortan internet, es porque van a cometer crímenes, sobre todo en las zonas que ya están bombardeando", denuncia la Fundación Comité de Apoyo al Pueblo Palestino a este periódico. Esta asociación explica que ellos trabajan con ONGs locales -con las que debido al apagón les está costando poder contactar- para llevar a cabo sus donaciones ya que debido al bloqueo israelí no es posible que llegue ayuda humanitaria desde el exterior. 

El corte de comunicaciones está afectando en mayor medida a la Ciudad de Gaza, en la cual se ha desplegado el Ejército israelí después de que hace casi diez días emitieran una orden de evacuación masiva para toda la ciudad, con una población de aproximadamente 800.000 habitantes. En este contexto, "las fuerzas israelíes bombardearon la infraestructura de comunicaciones o la desactivaron desde fuera de la Franja" para bloquear las comunicaciones por internet en la ciudad de Gaza, según denuncia Oxfam Intermón. "Lo más probable es que se trate de una acción deliberada diseñada para aislar aún más a los gazatíes que no se han desplazado y, por lo tanto, forzar su evacuación. En este momento, la red de telefonía móvil funciona en algunas zonas, aunque no de forma fiable", explica a Público Chris MacIntosh, trabajador de la ONG desde Deir el Balah, en el centro de la Franja.

"Israel busca aislar aún más a los gazatíes que no se han desplazado y forzar su evacuación"

Los trabajadores en el terreno ahora encuentran grandes dificultades para poder continuar con sus programas de ayuda en la ciudad de Gaza y alrededores. "La comunicación es una necesidad práctica para el personal de Oxfam que se coordina con nuestros socios sobre el terreno y mantenerse en contacto con nuestros equipos también es fundamental para la seguridad. Estamos intentando contactar con algunos miembros del personal que aún se encuentran en la ciudad de Gaza y que buscan trasladarse al sur", declara MacIntosh. 

"Lo hemos dicho demasiadas veces en los últimos seis meses, y cada vez que lo decimos, sigue siendo así: el panorama para la Franja de Gaza no ha sido más desalentador que ahora. Sin una intervención firme de la comunidad internacional para detener este ataque a la humanidad, seguirá deteriorándose", sentencia el trabajador humanitario.

No es la primera vez que un apagón de ese tipo ocurre, según la compañía de telecomunicaciones Paltel, Gaza ha sufrido al menos 11 cortes desde que comenzó la ofensiva israelí. En el anterior registrado, el pasado junio, la empresa ya alertaba -en declaraciones a Associated Press- que los continuos ataques a la red principal podrían hacer imposible el mantenimiento futuro, especialmente debido a la escasez de materiales y recursos esenciales.

Al menos 79 gazatíes murieron y 228 resultaron heridos este miércoles en Gaza por los ataques israelíes, según el Ministerio de Sanidad. Desde el inicio de la ofensiva israelí en octubre de 2023, los bombardeos han dejado 65.141 muertos y 165.925 heridos. De ellos, 435 personas han muerto por hambre y desnutrición debido al bloqueo, incluyendo cuatro fallecimientos reportados el miércoles, entre ellos un niño.

Una comisión independiente de la ONU, relatores de derechos humanos, organizaciones internacionales y un creciente número de países ya califican como un genocidio la ofensiva militar israelí contra la Franja.