En el post anterior comentaba la reciente introducción de un cómic sobre el Holocausto en las aulas alemanas y decía que sería un gran avance que esta práctica se extendiera.

Según lo escribía me venía a la cabeza algo relacionado que quería comentar pero que había "aparcado" por falta de tiempo. Y es que esta práctica tan inteligente y creativa (aunque pensándolo bien debería haber sido obvia) ya se estaba utilizando hace bastantes años en Estados Unidos.

Fue un profesor llamado Michael Bitz quien empezó a enseñar en sus clases de un colegio de Queens a través del tebeo en 2001. Lo llaman 'Comic Book Project'.

No se trata de poner una historieta delante del alumno y pedirle que la lea, sino de hacer que sean los propios alumnos quienes creen el cómic, desde los personajes y el argumento hasta la estética de éste. Tal ha sido la acogida que son directamente los estudiantes quienes forman clubs de cómics y manga, y se ha extendido a más de 850 escuelas del campo y la ciudad a lo largo del país.

Los profesores se han dado cuenta que es más fácil y mejor enseñar de este modo, y para las jóvenes mentes todo son ventajas.

Estaría muy bien que en nuestro país además de importar películas, comidas, bebidas, etc, del continente americano, también imitáramos ciertas deslumbrantes ideas como ésta, ¿verdad?