Alberto Núñez Feijóo ha comparado este lunes a Santiago Abascal con EH Bildu por no acudir al Día de la Hispanidad y no  haber "estado con el Jefe del Estado". Por haberle dado plantón. Son unas declaraciones que dan la medida de la relación actual entre el líder del Partido Popular y el de Vox y también de la intranquilidad que empieza a hacerse patante en Génova por la pujanza de la extrema derecha en las últimas encuestas y el daño que ello puede llegar a hacer a los populares. 

En el ecuador de la legislatura, la maquinaria de los distintos partidos no tiene más remedio que empezar a activar el modo electoral, si es que en algún momento lo desactivaron. Por eso en los interiores del número 13 de la madrileña calle Génova el nivel de preocupación irá en aumento si el PP no da con la clave para revertir una tendencia que empieza a verse clara.

El barómetro del CIS de octubre, cuyos resultados se han conocido este mismo lunes, ha sido muy crudo para el PP, a pesar de las dudas que despierta la cocina de Tezanos. Sin embargo, hay otros datos, más escondidos en la encuesta, que explican el nerviosismo que puede ir in crescendo en las filas del PP y también el aumento del tono de Feijóo contra Abascal.

Gráfico 1: Vox, a poco más de dos puntos del PP

El primer gráfico es el más sencillo, aunque también el que más críticas suscita. Desde el PP, de hecho, han reiterado en más de una ocasión que no confían en la cocina que hace José Félix Tezanos en sus encuestas. El Grupo Popular del Senado llegó a abrir incluso una comisión de investigación al respecto que sigue en marcha. De todos modos, la tendencia es muy clara. 

En dos años, y siempre según los números que arroja el CIS, el PP ha pasado de tener una intención de voto del 31,7% (llegando hasta el 34% en marzo de 2024) a un 19,8% en el barómetro de este lunes. Vox, en cambio, ha crecido ostensiblemente. Desde septiembre de 2023, ha pasado de representar la opción preferida para el 11,1% de los votantes, al 17,7%.

Gráfico 2: PP y Vox cambian las tornas

Pero si hay un gráfico que deberían colgar con una chincheta en los corchos de Génova 13 es el que refleja los cambios de intención de voto entre los votantes del PP y los de Vox. Por decirlo así, el cambio de preferencia dentro del propio circuito de la derecha estatal. Como refleja el gráfico sobre estas líneas, las tornas se han invertido totalmente en ese sentido. 

La legislatura empezó con un buen número de los electores que aseguraban haber elegido la papeleta de Vox el 23 de julio de 2023 declarando que, en unas próximas elecciones, votarían al PP (un 18,7% de ellos lo decía) y con un residual 1,5% de los encuestados que habían votado al PP respondiendo que apostarían en las siguientes elecciones por la extrema derecha de Vox. Pero pasados los meses, la tendencia es la contraria.

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En el barómetro publicado este lunes, el correspondiente a octubre de 2025, hasta un 16% de los encuestados que declaran haber votado al PP en julio de 2023 se decantarían en las próximas elecciones por Vox. Por el contrario, solo un 2,9% recorrería el camino inverso.

El cambio de tendencia se percibe a partir de noviembre de 2024, cuando declaraba ir del PP a Vox prácticamente el mismo porcentaje de votante que de Vox al PP. Sin embargo, la diferencia en favor de la extrema derecha empieza a ser muy pronunciada a partir de junio de 2025 y llega a su punto culminante —por el momento— este octubre.

Gráfico 3: las notas de Feijóo y Abascal

Los datos del CIS también reflejan que la figura de Feijóo ha perdido fuelle en estos últimos dos años. En octubre de 2023, el líder popular tenía una nota media de 4,48 teniendo en cuenta la valoración que le daban votantes de todos los partidos. Pero, tal y como se puede observar en el gráfico, su valoración ha ido descendiendo paulatinamente hasta situarse más o menos un punto por debajo, en un 3,46. El bajón más pronunciado lo tuvo en noviembre de 2024, pocos días después de la DANA.

La nota media de Santiago Abascal, en cambio, se ha mantenido constante. Siempre alrededor del tres, el líder ultraderechista ve ahora, al menos con la perspectiva que le da el CIS, más cerca a Feijóo que nunca esta legislatura.

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Gráfico 4: ¿cómo ve a Feijóo y Abascal el votante del PP?

Pero se puede hilar más fino. La popularidad de Feijóo también ha decrecido entre los electores que lo votaron en 2023. Sus propios votantes. Quien lo eligió el 23J daba a Feijóo en octubre de 2023 un 7,13 de valoración, pero tras estos dos años de legislatura quienes lo votaron en las pasadas elecciones solo le dan un aprobado raspado. Un 5,56. La tarea en la oposición no ha logrado, al menos según expone el CIS, mantener la ilusión del votante popular en torno a la figura de su líder.

En cambio, la percepción de ese mismo votante, el que votó a Feijóo el 23J, acerca de la figura de Abascal apenas se ha movido. En octubre de 2023 le daba un 4,15 y este octubre, un 4,06.

Gráfico 5: ¿y cómo ve a Abascal y Feijóo quien votó a Vox?

¿Y si se hace el ejercicio a la inversa? Si se analiza cómo valoran a los dos líderes derechistas los votantes de Vox también sale claramente ganando Abascal. Los datos reflejan que el presidente de Vox no ha perdido ni una pizca del apoyo de quien confió en él en 2023. Sin embargo, el votante de Vox sí tiene ahora una peor percepción de la figura de Feijóo que entonces.

Así, quien votó a Vox en 2023 da ahora a Abascal un 7,51 de valoración, una nota algo más de una décima por encima de la que le daba tras las últimas elecciones. A Feijóo, en cambio, el votante de Vox le daba en octubre de 2023 un 5,37 de media, mientras que en estos momentos le da un 3,98, es decir, más de un punto y medio menos.