MADRID.- El comité de campaña del Partido Popular se ha reunido esta mañana por primera vez en la sede central de la calle Génova y, al término del encuentro, el director de la campaña para las elecciones autonómicas y municipales, Carlos Floriano, ha comparecido ante los medios acompañado por el portavoz, Pablo Casado.

Floriano ha informado de cuáles van a ser los mensajes que el PP pretende trasladar a los ciudadanos para pedir su voto y, además, el también vicesecretario general de Organización ha anunciado que el partido ha emprendido una labor de autocrítica —"porque es un ejercicio sano", dice— admitiendo que "queda mucho trabajo por hacer".

El "cambio radical" del país desde 2011 —año en el que Mariano Rajoy asumió el Gobierno— hasta este 2015 —en el que se celebran elecciones— es la baza más importante con la que juega el PP para mantener al electorado fiel y tratar de recuperar al descontento. Según Floriano, las reformas de Rajoy han permitido el "cambio de tendencias" y España ha pasado de ser un país a punto del rescate y de salir del euro, a erigirse en líder del crecimiento económico y la creación de empleo.

Impedir la abstención

Sin embargo, el jefe de campaña del PP admite que "queda mucho trabajo por hacer". De esta forma, al tiempo que el partido de Rajoy se presenta como "valor seguro" y garantía de "estabilidad" para continuar las reformas, trata de atraerse el voto de la decepción y la abstención informando de los compromisos de futuro, que sólo podrán ejecutarse "si el PP vuelve a ganar" y de los que se dará cuenta a partir de la semana próxima en la web www.aunquedamuchoporhacer.es.