La primera jornada de realización de test anticuerpos a los docentes de la Comunidad de Madrid previa al inicio del curso escolar ha transcurrido este miércoles entre largas colas y quejas de los profesores que han acudido al instituto Virgen de la Paloma, el único centro de la capital habilitado a este fin por el Gobierno regional. El caos ha sido de tal calibre que pasado el mediodía la consejería de Educación ha suspendido las pruebas del coronavirus a los docentes de la capital por la saturación y las largas colas registradas este miércoles por la mañana, según ha adelantado la cadena Ser.

La Consejería de Educación y Juventud ha escogido cinco centros para la realización de estas pruebas, uno por cada Dirección de Área Territorial, por lo que todos los profesores que imparten clase en la capital han de acudir a este instituto de la calle Francos Rodríguez.

Además, las pruebas han sido adjudicadas a una empresa privada, Ribera Salud, según ha informado la cadena Ser. Fiel a su estilo, la Comunidad de Madrid ha decidido privatizar los test serológicos a los profesores madrileños, lo que ha originado no pocos problemas. 

Ribera Salud, apunta la cadena Ser, no ha querido desvelar cuánto cobrará por la realización de estos 100.000 test. "Esa información debe facilitarla la Consejería de Educación porque es un proyecto organizado y coordinado por ellos", han explicado fuentes de Ribera Salud a la SER.

Facua Madrid ha presentado una denuncia este miércoles ante la Agencia Española de Protección de Datos (AEDP) por la difusión de datos personales de los trabajadores de centros de enseñanza de la Comunidad de Madrid.

Según ha indicado Facua en un comunicado, los profesores recibieron la noche del martes un correo electrónico, a través de la Consejería de Educación y Juventud, en el que les citaban para una PCR que les realizaría Ribera Salud (empresa que hizo test serológicos masivos en Torrejón de Ardoz), acompañado de un documento adjunto con datos de casi 17.000 trabajadores del Área Territorial Madrid-Sur.

En dicho documento aparecían el nombre, los apellidos, el sexo y el carácter de docentes o no docentes de 16.720 trabajadores, así como el lugar y la hora en los que estaban citados para la prueba para el diagnóstico del coronavirus.

Desde Facua han incidido en que los docentes no han dado su autorización para la distribución de sus datos, cuya difusión vulnera el artículo 6 del Reglamento 2016/679 del Parlamento Europeo y del Consejo de 27 de abril de 2016, relativo a la protección de las personas físicas en lo que respecta al tratamiento de datos personales y a la libre circulación de éstos.

La viceconsejera de Organización Educativa de la Comunidad de Madrid, Pilar Ponce, ha asegurado que la Consejería va a "revisar" lo sucedido, aunque ha defendido que los datos que aparecen en el documento publicado "son públicos, como los de todo funcionario", y "solamente" hacen referencia al nombre del docente y centro donde está ubicado.

Ponce, que esta mañana ha visitado el dispositivo para la realización de test en el Instituto de Formación Integral en Seguridad y Emergencias (Ifise), ha añadido que los datos que son susceptibles de ser protegidos por la Ley de protección de datos, como puede ser el DNI, "no aparecen en el documento".

Además, ha argumentado que han utilizado el sistema que habitualmente utilizan en la Dirección de Área Territorial del Sur, y ha insistido en que los datos facilitados de los docentes y el personal "se pueden conocer" al ser funcionarios.

Caos organizativo

Este miércoles ha sido la primera jornada de realización de test anticuerpos a los docentes de la Comunidad de Madrid previa al inicio del curso escolar que ha transcurrido entre largas colas y quejas de los profesores que han acudido al instituto Virgen de la Paloma, el único centro de la capital habilitado a este fin por el Gobierno regional.

Según han indicado a Efe varios profesores que aguardaban su turno, los centros recibieron el lunes por la tarde un correo, que luego tuvieron que remitir al personal, donde se les indicaba la hora y lugar donde debían acudir.

Más tarde les llegó un formulario para expresar su consentimiento a someterse a las pruebas al que ha tenido acceso Efe y en el que se confirma el adecuado "procedimiento de toma de muestras" de la detección de anticuerpos.

"Autorizo a la Comunidad de Madrid, en caso de que el resultado de los test de anticuerpo y/o el PCR sea positivo y conforme a la normativa de prevención de riesgo laborales, a que tenga acceso al resultado del mismo", indica el documento.

Esta autorización tiene como objetivo que en el plazo de 24 horas el Ejecutivo regional asegure la protección de la salud del resto de los trabajadores y que la empresa tenga tiempo para diseñar un plan de contingencia y la correcta elaboración de los cuadrantes de trabajo.

Además de por la poca antelación, los profesores consultados, algunos de los cuales hacían cola desde hacía más de tres horas, se han quejado por el hecho de que hubiera sólo un centro habilitado para toda la capital y por la ausencia de medidas de seguridad y distanciamiento a la entrada del mismo.

La Comunidad pretende realizar hasta el próximo lunes pruebas de anticuerpos a alrededor de 100.000 docentes.

La vuelta a las aulas se realizará escalonadamente en los próximos días, siendo los alumnos del primer ciclo de Infantil (0-3 años) los primeros que empezarán el curso presencial este viernes, día 4.