Decenas de activistas de la organización ecologista 'Extinction Rebellion' se han manifestado esta mañana en la Plaza de España de Madrid, colapsando la Gran Vía, para denunciar la "inacción climática por parte del Gobierno" y alertar de que "no habrá tiempo" para una siguiente Cumbre del Clima.

A pocos días de la celebración de la Cumbre de Cambio Climático (COP26), que se celebrará en la ciudad escocesa de Glasgow del 31 de octubre al 12 de noviembre, los activistas han exhibido pancartas en las que se podía leer: "ante la inacción, Rebelión" y "el Gobierno debe actuar ya frente a la crisis climática".

Además, varios activistas se han encadenado a "bidones de gasolina" utilizando tubos de bloqueo en mitad de la vía y alrededor de un gran reloj de arena, al que se ha subido uno de los manifestantes, hasta que la policía ha cortado estos bloqueos con sierras radiales y les han desplazado.

Representantes de la organización han lamentado que esta manifestación sea "la única opción que les queda" para que los gobiernos "tomen riendas en el asunto" y dejen de "ignorar a la comunidad científica".

"La COP26 es decisiva"

La portavoz de 'Extinction Rebellion España', Patricia Herrero, ha denunciado que la COP26 es un lugar donde los gobiernos se reúnen "para no hacer nada" a la altura de la emergencia climática, mientras que la vida de millones de personas, así como la biodiversidad, "está en peligro".

Tras 25 Cumbres celebradas desde la primera en 1995, se han liberado la mitad de gases de efecto invernadero de toda la historia y, por lo tanto, si no se rompe esa tendencia, el planeta irá "directo al desastre", ha aseverado.

Miembros del movimiento ecologista han asegurado que esta "COP26 es decisiva" tras los datos publicados por el Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC), que alertan de las consecuencias del calentamiento global y la limitación a 1,5 grados acordada por los países en el Acuerdo de París de 2015.

Una vez que la vía ha podido ser desbloqueada, los manifestantes se han dirigido a los transeúntes para llamar su atención sobre la urgencia de una "acción climática" ante la pérdida de biodiversidad, la contaminación del agua y el uso "desmedido" del agua por parte de las empresas energéticas.

Han resaltado la situación de desabastecimiento que vive el planeta como consecuencia de la crisis energética y la subida de la electricidad y han reclamado que "se deje de engañar al mundo, esto no es progreso".

Los manifestantes, en su mayoría jóvenes, han pedido una "revolución" para convertir este mundo "en uno más amable, más solidario," con un futuro posible para las generaciones venideras, y han propuesto la creación de una Asamblea Ciudadana Climática como "herramienta de desbloqueo político".

Esta protesta pone fin a la Semana de Rebelión de Extinction Rebellion que ha llevado a cabo en Madrid ocho acciones de desobediencia civil no violenta para visibilizar las distintas implicaciones de la crisis climática, ecológica y social.