Con el objetivo de construir una sociedad mejor y más justa que ofrezca oportunidades a quienes más lo necesitan, la Fundación "la Caixa" impulsa el progreso social a través de diversos programas que tienen un poder transformador y un impacto duradero. De esta manera, personas en situación de vulnerabilidad pueden desarrollar su potencial, sus capacidades y talento mediante una metodología contrastada.

Así se puso de manifiesto en el acto Claves para el progreso social, celebrado en CaixaForum Madrid, que contó con la presencia de la directora general adjunta de la Fundación "la Caixa", Elisa Durán, y el subdirector general de la entidad, Marc Simón, entre otros.

La Fundación "la Caixa" desarrolla programas sociales que se adaptan a la realidad de cada momento. Y es que en España hay actualmente 2,4 millones de niños y niñas viven en hogares por debajo del umbral de la pobreza. Es decir, el problema afecta al 29% de los menores de 18 años de nuestro país, y después también a los jóvenes, ya que el 28% de ellos se encuentra en situación de desempleo. En cuanto a las personas mayores, se prevé que representen el 36% de la población española en 2050 y, por otra parte, casi 3 millones de personas mayores viven en situación de soledad y alrededor de 116.000 personas requieren atención psicosocial al final de la vida.

La Fundación "la Caixa" es la primera fundación de España y una de las más grandes del mundo, y lleva a cabo una acción social pionera y diferencial, en red con entidades e instituciones.

Cuenta con programas desde las edades más tempranas hasta el final de la vida, que plantean desde formación a los más jóvenes hasta la búsqueda de empleo, actividades y proyectos en la madurez, y con apoyo psicosocial y espiritual al final de vida, tanto para pacientes como para familiares.

Este año 2023, la Fundación "la Caixa" dispone del mayor presupuesto de su historia, con cerca de casi 540 millones de euros, y un 60% de montante (320 millones) se destina al desarrollo, expansión y consolidación de sus proyectos sociales como CaixaProinfancia; que acompaña a más de 62.000 niños y niñas en situación de vulnerabilidad y a más de 38.000 familias; Incorpora, que consigue cada año más de 45.000 contrataciones de personas en riesgo de exclusión; y el programa para la Atención Integral a Personas con Enfermedades Avanzadas, que atiende a más de 38.000 pacientes y 40.000 familiares.

La entidad cuenta también con el programa de Personas Mayores, en cuyas actividades, impulsadas en los 629 centros que forman la red de centros propios y en convenio con las administraciones, participan cerca de 300.000 personas mayores cada año. Y las convocatorias de Proyectos Sociales de la Fundación "la Caixa" abarcan cerca de 1.500 iniciativas a través de las entidades.

Mayores riesgos que en otros países

En este sentido, el presidente del Consejo Económico y Social de España, Antón Costas, desveló en el acto desarrollado en CaixaForum Madrid datos de un estudio inédito elaborado por el Observatorio Social de la Fundación "la Caixa" bajo el título Dinámica de la pobreza multidimensional en España y otros países europeos. Tras analizar más de 20 países europeos entre 2016 y 2020, se aprecia que, a diferencia de otros países europeos, España no experimentó una reducción de la incidencia de la pobreza durante dicho período.

El estudio concluye que las personas en situación de vulnerabilidad en España tienen mayor riesgo de enfrentar nuevas carencias (como hacinamiento, bajo sueldo, baja intensidad en el trabajo o mala salud) y menor probabilidad de dejar de sufrir las carencias que ya tienen, en comparación con las personas en situación más favorable.

La directora general adjunta de la Fundación "la Caixa", Elisa Durán, destacó que «Impulsamos desde nuestros inicios, hace 119 años, una filantropía colaborativa con todos los agentes del territorio para anticiparnos a las necesidades sociales. Conscientes de la responsabilidad que tenemos, trabajamos con eficiencia y el rigor para que esta labor compartida tenga un impacto real y transformador en la vida de las personas».

Las claves del modelo de la Fundación  "la Caixa”

La primera clave del modelo social es ubicar a la persona en el centro: escucharla, hacerla protagonista y acompañarla.

La segunda  clave pasa por la colaboración. La Fundación "la Caixa" colabora con 2.000 entidades para llevar a cabo los proyectos en todas las comunidades autónomas.
El tercer gran eje es personalizar, porque no sirven situaciones en las que se le da lo mismo a todos. Eso sería una utilización poco eficiente de los recursos y poco razonable. Es mejor primero evaluar qué necesita cada uno y construir itinerarios personalizados.

La cuarta clave es el territorio, importante porque muchas veces las vulnerabilidades se concentran en territorios concretos. Identificarse con el territorio y con lo que pasa propicia una responsabilidad de intervenir.

La metodología es la quinta clave, y llega de la mano de direcciones científicas. La Fundación "la Caixa" dispone de una red de universidades, de conocimiento, para garantizarse su funcionabilidad.

Con esta metodología se consigue afrontar problemas que no tienen una solución conocida y por lo tanto hacerlo sin una perspectiva innovadora sería imposible, que se acompaña de una necesidad de formación, tanto para profesionales y voluntarios de las entidades, para intervenir de maneras orquestadas y alcanzar resultados.

Es más, mediante estas líneas de actuación, en constante evolución y crecimiento, la entidad, junto con las organizaciones sociales, radiografía los entornos vulnerables para dar respuesta a los mayores retos a los que se enfrenta la sociedad: las nuevas formas de pobreza, la sensación de aislamiento y soledad, el envejecimiento poblacional, la desigualdad de oportunidades laborales y formativas, los problemas de salud mental y el proceso de final de vida y duelo, entre otros.

Catorce historias de superación

En el encuentro Claves para el progreso social se presentó el proyecto documental Vidas contadas: 14 historias de superación. En él se da voz a diferentes beneficiarios que son el ejemplo de que el modelo actual funciona y que comparten sus aprendizajes en positivo tras atravesar distintas situaciones de complejidad. Cada una desde su particular mirada y vivencia única.

Este proyecto, dirigido a concienciar a la ciudadanía, muestra que es posible desarrollar capacidad y empoderamiento para salir de situaciones de vulnerabilidad.

"Ahora me siento parte de algo después de sentir que no formaba parte de nada. La vida trata de descubrir cuál es tu poder y usarlo para jamás rendirte", afirma Bárbara, participante del programa CaixaProinfancia, que llegó a Galicia dejando atrás su país, Venezuela, y que ha logrado acceder a la universidad.

También Rosa, que vivió el fallecimiento de su madre y fue atendida por el programa para la Atención Integral a Personas con Enfermedades Avanzadas. Hoy puede hablar del proceso y decir que el acompañamiento psicológico del programa ha sido clave: "He aprendido a gestionar mis emociones y a mirarle al miedo a la cara. Me siento reconfortada".

Por su parte, Mari Pepa vivió una situación de adversidad cuando fue despedida de su trabajo con 61 años, con pocas perspectivas de volver a encontrar otro. Fue entonces cuando decidió colaborar con el proyecto Mi cachito de huerto, de la Asociación Imagina: "Gracias al voluntariado pude ayudar a los demás, sentirme útil, y he vuelto a trabajar; esta vez, acompañando a personas con diversidad funcional… Me siento afortunada".

Son los testimonios de personas con circunstancias muy diferentes que salieron adelante gracias a la ayuda de los programas de la Fundación "la Caixa", que presta su apoyo y ayuda de manera efectiva, al tiempo que replantea una sociedad más justa y colaborativa.