El PSOE ha registrado este martes en el Congreso una proposición de ley para regular los derechos de las personas ante el proceso final de la vida, con el objetivo de garantizar la muerte sin dolor y con dignidad y asegurar el amparo jurídico a los profesionales médicos y administraciones públicas.

Se trata de la tercera propuesta de ley para regular la muerte digna que se presenta en esta legislatura, tras las planteada por Ciudadanos y por Unidos Podemos.

En declaraciones posteriores, la secretaria adjunta del Grupo Socialista, Marisol Pérez, ha afirmado que se trata de una "norma necesaria" para la calidad asistencial, con la que aplicar terapias existentes que cuentan con el aval científico de la comunidad sanitaria.

Sobre la iniciativa parlamentaria de Unidos Podemos relativa a la despenalización de la eutanasia, Pérez ha afirmado que "eso no toca ahora" aunque se ha mostrado abierta ante la posibilidad de comenzar un debate con la sociedad "sosegado y riguroso" sobre el tema.

Ha explicado que la proposición de ley presentada hoy tiene el apoyo de una "mayoría sustancial del Parlamento" y que emana de otra planteada por el último Gobierno de Zapatero en 2011, que no se terminó de tramitar en la Cámara, por lo que ya tiene "mucho trabajo realizado".

Además, ya existen algunas parecidas en parlamentos autonómicos como el de Andalucía, como ha recordado Pérez.

La secretaria adjunta del Grupo Socialista, Marisol Pérez Domínguez (c), y los portavoces de Sanidad en el Congreso y el Senado, Jesús María Fernández (d), y José Martínez Olmos (i) realizan una declaracones tras presentar una proposición de ley reguladora de los derechos de la persona ante el proceso final de la vida. EFE/Emilio Naranjo

El portavoz socialista de Sanidad en el Congreso, Jesús María Fernández, ha explicado que la ley tiene tres apartados: uno con los derechos de las personas en el proceso final de la vida, otro sobre las actuaciones de los médicos y uno final que trata las obligaciones de las administraciones sanitarias.

Entre estos, destaca el derecho a la información y autodeterminación de los pacientes, el acceso universal a cuidados paliativos integrales y la ponderación terapéutica, para evitar el "ensañamiento" de los médicos y que se respeten las decisiones tomadas por los enfermos.

Ha explicado que la ley también regulará la dignidad de los pacientes en los momentos finales de vida, al asegurar la intimidad con habitación individual en los hospitales y el derecho al auxilio espiritual.

Por su parte, el portavoz socialista de Sanidad en el Senado, Pepe Martínez Olmos, ha criticado que el PP, en la última legislatura completa, hubiera dicho no "hasta dos veces" a esta ley, "una de las más sociales" a su juicio.

"La ley expone derechos para recibir respuestas asistenciales que tienen evidencia científica, que pueden evitar que personas mueran sin dignidad y con dolor cuando hay mecanismos terapéuticos para ello", ha señalado Martínez.