La Orden de las Clarisas rompe vínculos con las monjas de Belorado

La Orden de las Hermanas Clarisas ha tomado la decisión de desvincularse de las religiosas de Belorado (Burgos) y Orduña (Bizkaia) después de que éstas abandonaran la Iglesia católica. "No se puede ser clarisa fuera de esta obediencia", ha asegurado la Confederación de Clarisas de España y Portugal a través de un comunicado online.

Este escrito se suma al emitido la semana pasada por la Federación de Clarisas de Nuestra Señora de Arantzazu y la Provincia Franciscana, o al del ministro general de la Orden de los Frailes Menores, que rechazó sus "reconstrucciones precarias de la historia de la Iglesia en los últimos 70 años". "Espero que la herida infligida a la unidad de la Iglesia, el escándalo causado a muchos fieles, el desconcierto y el dolor causados entre todas las Hermanas Clarisas de España y a nuestra Orden, sanen pronto", indicaba la agrupación.

La Confederación de Clarisas de España y Portugal engloba a las federaciones Bética, Castilla, Cartagena-Murcia, Cantabria, Catalunya-Castelló-Menorca, Granada, Santiago, Divina Providencia y Valencia-Aragón-Mallorca. 

A pesar de haber acusado en varias ocasiones a las monjas de infidelidad a la Iglesia Católica, han insistido en que ofrecerán su perdón si "reconocen su error" y retornan a la Iglesia. "Si estas hermanas reconocen su error y vuelven a la comunión con la Iglesia Católica y a la Orden de Santa Clara, manifestamos nuestra disponibilidad para acogerlas nuevamente, con el mismo cariño que se las recibió el día de su profesión", han alegado desde la Orden. 

Las Hermanas Clarisas han aseverado que el paso tomado por las religiosas beliforanas de cara a ser tuteladas por el excomulgado Pablo de Rojas ha supuesto "un gran escándalo para muchos" y ha causado en el seno de la Orden "un profundo dolor y consternación". Por ello, han remarcado su voluntad expresa de "desvincularse de esas opciones", que han calificado de "exclusivas" del Monasterio de Belorado. 

Las religiosas han reafirmado su adhesión al Concilio Vaticano II, rechazado por las monjas burgalesas, y han aseverado que éstas deberían volver "al origen de su consagración, del que se están alejando". Ello implicaría la comunión con el Magisterio de la Iglesia Católica ya que, aseguran, "no se puede ser clarisa fuera de esta obediencia". 

Mientras continúa esta historia telenovelesca, la comunidad de religiosas de Belorado ha compartido a través de su recién creado perfil en "Instragram" (@tehagoluz), que cuenta ya con casi 5.500 seguidores, un aviso tras detectar dos cuentas falsas que se hacen pasar por ellas e, incluso, dicen sortear sus trufas.