La escudería Brawn GP puede liderar una revolución de "combustible limpio" en la Fórmula Uno, dijo el sábado el empresario británico Richard Branson después de que su Grupo Virgin acordara patrocinar a la nueva escudería de la categoría.

El propietario de Virgin Atlantic, cuyos intereses van desde los viajes espaciales a los refrescos, dijo en una rueda de prensa en el Gran Premio de Australia que una compañía respaldada por Virgin había desarrollado un combustible limpio que podría cambiar la imagen sucia de la F1.

"Durante los próximos meses intentaremos hablar con la Fórmula Uno y las varias compañías de coches para ver si podemos introducir este combustible como el que utilice el deporte", explicó Branson.

"Este deporte puede pasar de ser uno ligeramente contaminante a uno limpio. Espero con ganas trabajar dentro del deporte para hacer el intento y cambiarlo", añadió.

Posteriormente, Branson aseguró a periodistas en el circuito Albert Park que no procuraba hacer dinero a partir del combustible y que estaría feliz de dárselo a las otras compañías, como Shell, que ya están involucradas en el deporte, y trabajar con ellas.

SALIDA DE HONDA

Brawn GP reemplazó a Honda, que se retiró en diciembre debido a la crisis financiera global, tras una compra por parte de la gerencia del equipo, ejecutada por el ex jefe de la escudería Ross Brawn.

Branson había sido visto como un comprador potencial del equipo de la automotriz japonesa cuando se hacía evidente que éste se retiraría de la F1.

No se dieron detalles financieros del acuerdo, que Branson firmó cuatro horas antes de abordar el avión hacia Australia y se produjo cuando los fabricantes de automóviles están siendo golpeados por la crisis económica y algunos grandes patrocinadores se están retirando.

Branson dijo que no habría considerado la F1 sin las recientes medidas para reducir costes y hacer el deporte accesible a nuevos participantes, al mismo tiempo que siga siendo altamente innovador.

El equipo, con Jenson Button y Rubens Barrichello como piloto, es favorito para ganar el domingo en Melbourne, en la apertura de la temporada 2009, después de que el inglés se quedara el sábado con la "pole position" en la clasificación, seguido por su compañero brasileño.