Tal vez haya sido la agobiante huelga de guionistas o la guerra en Irak y Afganistán. O tal vez algo en la exclusiva agua embotellada de Beverly Hills, donde residen los organizadores de los Oscar.

Sea cual sea la razón, Hollywood parece no estar de humor estos días, y las nominaciones de este año para uno de los galardones más importantes de la industria reflejan el sombrío ambiente en el que se ha sumido la meca del cine.

¿Quiere traición, venganza, amores condenados al fracaso, asesinato o desesperación? Vaya a ver las películas nominadas No es país para viejos, Expiación, Michael Clayton y Pozos de ambición.

¿Prefiere parálisis y enfermedad? Inténtelo con La escafandra y la mariposa que le ha valido a Julian Schabel una nominación como mejor director, o el documental SiCKO de Michael Moore.

La mirada más deprimente desde la nouvelle vague 

Howard Suber, fundador del Programa de Productores de Cine y Televisión de la UCLA y autor de The Power of Film, dijo que nunca había visto una mirada más deprimente de la naturaleza humana en un grupo de películas desde el cine francés de los sesenta.

La comedia Juno sobre una adolescente embarazada, incluida en la categoría a mejor película, aligera un poco el tono lúgubre y como es lógico, es el único éxito del grupo, con 125 millones de dólares (85 millones de euros) recaudados en la taquilla norteamricana hasta el momento.

No es país para viejos ha recaudado 61 millones y Pozos de ambición apenas 32 millones, y ambas son las películas con más nominaciones para los Oscar, ocho cada una.

Es posible que las cinco nominadas a mejor película formen el grupo con la recaudación más baja en la taquilla local de los últimos 20 años, equivalente a un anémico 3% de la recaudción de 2007, de un total de aproximadamente 9.700 millones de dólares.

Muchos de los éxitos del año -Spider-Man 3, Transformers, Lío embarazoso y Supersalidos- eran comedias y películas de fantasía 'en su mayoría destinadas a niños de 11 años', según el crítico de cine Bob Strauss, del Los Angeles Daily News.

Los 5.800 votantes de la Academia de Artes y Ciencias Cinematogrfica, sin embargo, son adultos que trabajan en la industria y prefieren dramas serios con preguntas complejas sobre la naturaleza humana.

Pero los aficionados, indicó Suber, no quieren enfrentarse a la realidad: 'El público no quiere ver películas sobre la guerra en Irak. Quiere escapar de las malas noticias'.