MADRID.- Sam ‘Ace’ Rothsein, el personaje que interpretaba De Niro en Casino, de Martin Scorsese, lo dejó clarísimo cuando dijo: “Hay tres maneras de hacer las cosas, la correcta, la incorrecta y la mía”. El equipo de la revista CLAPP se apropia ahora de estas palabras y las lleva a su terreno, el del periodismo cultural, y hace de ellas una muy precisa declaración de intenciones. “En periodismo y en cine, como en general en la vida, hay muchas formas de hacer las cosas, nosotros –CLAPP- nos quedamos con la nuestra”, dice el editorial del primer número de esta revista digital, que se presenta oficialmente hoy en Madrid y que pone el acento en el cine, aunque en ella se habla también de series, de videojuegos, de literatura, cómics...

CLAPP es la primera revista digital de cine que aparece en España con ciertas condiciones técnicas. Mensual y gratuita, una vez que el lector la ha descargado puede acceder a su contenido sin necesidad de estar conectado a Internet. Una novedad, sobre todo teniendo en cuenta que es una publicación de nueva generación. El futuro ya está aquí y esta revista no solo tiene redactores, diseñadores y fotógrafos, sino que en ella trabajan también realizadores, guionistas, actores, sonidistas, músicos...

“Plano”, “One of Us”, “Yo confieso”, “Rayos X”, “Toma Uno”, “Serialmentes”, “Ciudadano Game”, “Instagranma” son algunas de las secciones de una publicación que en cada número pretende hacer sus propias apuestas. Sin dejar de lado la actualidad, el equipo de CLAPP elegirá solo algunos títulos de entre todos los estrenos del mes e intentará “exprimirlos al máximo”, explican sus responsables.

Crónicas, entrevistas –escritas y grabadas-, fotos y vídeos (tráilers, teaser…), audios, música… en manos de un equipo de profesionales, entre los que hay periodistas especializados en información cultural, escritores, traductores, guionistas de televisión… y dos personajes clave, un héroe y un supervillano. Ellos son El Fontanero de las Series, “soy un fontanero que habla de series”, y que es un héroe porque se ve todas las novedades “para que el lector-espectador no tenga que perder el tiempo y vaya directamente a las de calidad”, y Spoilerman, un aspirante a crítico, “un sabelotodo vitriólico y bellaco, empeñado en arruinar las sorpresas del cine”.