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Cambiasso da oxígeno a Benítez

La soga del despido comenzaba a apretarle a Rafa Benítez más que la corbata

A. L. M.

La soga del despido comenzaba a apretarle a Rafa Benítez más que la corbata, cuando apareció Cambiasso y le dio oxígeno, al menos hasta el domingo. En el minuto 60, el argentino aprovechó un rechace para rematar con la zurda el gol de la victoria del Inter (1-0) ante el Twente holandés. El conjunto milanés certificó su clasificación para octavos y sólo queda por dirimir quién pasa como líder: el grupo que entrena Benítez o los ingleses del Tottenham.

El Inter sufrió de nuevo más de lo deseable, sobre todo por su falta de puntería en los primeros compases. Sneijder, que ha pasado de deslumbrar el año pasado bajo la batuta de Mourinho a no encontrar puerta con Benítez, falló una clara ocasión ante el portero rival y envió luego el balón al larguero. Fiados a la fortuna, los holandeses miraron hacia la portería italiana y dieron un par de sustos.

También sacó ayer su billete para la siguiente ronda el Schalke 04 de Raúl. El delantero español no marcó, pero su equipo avasalló (3-0) al Lyon, con goles de Farfán y doblete de Huntelaar. El también ex madridista holandés sigue en racha. Los franceses, ya clasificados, y los alemanes se juegan en la última jornada el primer y segundo puesto del grupo B.

En principio, el Lyon parte como favorito, pues recibe al Hapoel, mientras que el Schalke viaja a Lisboa para visitar al Benfica. No obstante, los de Tel Aviv dieron ayer la sorpresa al golear a los portugueses (3-0), con dos tantos de Zahavy y otro de Douglas.

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