El Chelsea obligó a José Mourinho a comprometerse por contrato a no entrenar a ningún otro equipo de la Premier League inglesa esta temporada como parte del acuerdo de despedida de su viejo club.

Así lo señala hoy el vespertino 'Evening Standard', según el cual el técnico portugués aceptó esa imposición, que bloquea un eventual acuerdo con el Tottenhan HotSpurs, que había declarado su interés en sustituir con él a Martin Jol.

Según el rotativo, el Hotspurs comenzó a interesarse hace un año por Mourinho, cuya salida repentina del Chelsea le colocaba en principio como favorito para entrenar al Hotspurs, por delante de Juan de Ramos, del Sevilla.

El diario británico señala que dado que hay una serie de clubes europeos que se interesan por Mourinho, comenzando por el Atlético de Madrid, es más que probable que le contraten otros antes de que pueda hacerlo un club británico.

Se cree que el Chelsea ha ofrecido, por otro lado, 135.000 libras (195.000 euros) semanales a Frank Lampard para impedirle que tome el mismo camino que Mourinho. Avram Grant, que ha reemplazado a Mourinho en el Chelsea, confía en que un eventual acuerdo con Lampard ayude a tranquilizar los ánimos de los jugadores.

Didier Drogba, que está supuestamente hundido por la salida del portugués, se cuestiona supuestamente su propio futuro en el club, dice el periódico. Lampard, al igual que Drogba muy próximo a Mourinho, ha expresado el deseo de que no hablar de una posible renovación de su contrato hasta el próximo verano, cuando sólo faltará un año para que expire el que le liga actualmente al club.