Público
Público

Nilmar y Rossi quiebran al Atlético

La pareja ofensiva del Villarreal destrozan el plan de Quique

LADISLAO MOÑINO

 

Dos maniobras majestuosas de Nilmar y Rossi quebraron al Atlético en El Madrigal. Las dos en el inicio de cada tiempo. Dos palos de los que no se pudo recuperar el Atlético, aunque dos posibles penaltis sobre el Kun que no señaló Ramírez podrían haber cambiado el paisaje.

El primero en desbaratar el plan de Quique de presionar arriba con Diego Costa y el Kun fue Nilmar, que de paso apagó la atrevida salida del Atlético. Había amenazado Agüero con un regate prodigioso sobre Ángel y un gol anulado por fuera de juego. Habían pasado cinco minutos y el balón era del Atlético.

El Villarreal no encontraba su razón de ser, la pelota, pero sí descubrió un agujero en esa presión que le impedía gobernar el partido. Nilmar recibió de espaldas en el círculo central, se giró para soltar a Assunçao y se encontró una inmensa pradera por delante para conducir el contragolpe. Él lo hizo todo bien, pero no la línea defensiva del Atlético, que reculó en vez de achicar hacia adelante para provocar el fuera de juego de Cani, descubierto por Nilmar camino del gol. Con el guardameta atlético a media salida, a Cani le bastó un toque suave para batirle.

El tanto asentó al Villarreal en su búsqueda de posesiones más largas. El Atlético siguió con ese ritmo frenético con el que inició el encuentro, pero sin un plan punzante. Le faltó fútbol por el medio, lo que no es extraño con Assunçao y Raúl García en el corazón del juego. Este último puede ofrecer trabajo y algún disparo lejano, pero desde que está en el Atlético no ha enseñado nada más. Por repertorio mostrado el banquillo debería ser su lugar más común. Tampoco le funcionaron las bandas. Simao entró poco en acción. Reyes un poco más, pero tampoco fue definitivo nada de lo que intentó.

La velocidad y movilidad de Nilmar y Rossi tuvo en vilo a toda la defensa rojiblanca

Lo que sí estaba cargado de intención era todo lo que hacían Nilmar y Rossi. Su velocidad y movilidad tuvo en vilo a toda la defensa rojiblanca sin excepción. Caían por la derecha, por la izquierda y por el centro. Siempre con la espalda ganada al defensor rojiblanco que le tocaba lidiar con ellos. Siempre con el balón ya circulándole al Villarreal como le gusta. La sensación de superioridad desde la pelota se acentuó en la segunda mitad, con Matilla en el campo por Senna, que se quedó en la ducha.

Con el joven mediocentro canterano, Garrido plasmó ese fútbol que él mismo se encargó de difundir por las categorías inferiores del club y del segundo equipo. Un juego de toque, refinado y elaborado, a veces, hasta empalagoso de lo académico y respetuoso que con el balón. Ese es el sello de un club que ha buscado su identidad a través de jugar la pelota y que ahora mismo es la alternativa más firme para evitar otras Liga escocesa. Y es fue el sello con el que remató al Atlético. Una larga cadena de toques con el balón visitando todo el campo. Ora hacia adelante, ora hacia atrás. Hasta que Matilla abrió el juego a la izquierda desde la otra orilla, Cani aceleró y vio un desmarque de Rossi en el área.

El italiano recibió de espaldas, se giró, puso a Godín mirando a las vallas publicitarias y le mandó a De Gea un remate sibilino, ajustado y raso a su palo derecho.Dos tantos fueron ya demasiado para el Atlético. Quique dio entrada a Forlán, pero dio igual porque el uruguayo ya estaba fuera del partido desde que se supo en el banquillo.

2 - Villarreal: Diego López; Ángel, Gonzalo, Marchena, Capdevila; Cazorla, Bruno, Senna (Matilla, m. 46), Cani; Nilmar (Mario, m. 84) y Rossi (Marco Ruben, m. 89).

0 - Atlético: De Gea; Ujfalusi, Perea, Godín, Luis Filipe; Reyes,, Raúl García, Assunçao (Thiago, m. 55), Simao (Fran Mérida, m. 79); Kun y Diego Costa (Forlán, m. 55).

Goles:1-0. M. 8. Nilmar se zafa de Assunçao en el centro del campo e inicia una galopada que culmina con una gran asistencia a Cani, que supera a De Gea con un toque por abajo. 2-0. M. 52. Rossi recibe en el área tras un gran desmarque, se gira, sienta a Godín y marca de tiro raso y ajustado.

Árbitro: Ramírez. Expulsó a Quique (m. 45) por protestar aun posible penalti no señalado de Gonzalo al Kun. Mostró tarjeta amarilla a Perea, Diego Costa, Reyes, Bruno, Rossi

El Madrigal: 23.000 espectadores.

¿Te ha resultado interesante esta noticia?