El Ejecutivo de Mariano Rajoy ha nombrado como subdelegado del Gobierno en Guadalajara a Juan Pablo Sánchez Sánchez-Seco, exsenador del PP y exalcalde de Pastrana imputado por un caso de corrupción cometido, supuestamente, durante su etapa al frente de ese consistorio.

Sánchez Sánchez-Seco está acusado de un delito de prevaricación urbanística por permitir presuntamente entre 2006 y 2007 la construcción de varios adosados y dos viviendas en Pastrana en suelo no urbanizado a sabiendas de que cometía un acto ilegal. Por estos hechos tuvo que declarar ante el Juzgado de Instrucción Número 1 de Guadalajara el pasado 19 de septiembre.

Durante su declaración, a la que tuvo acceso Público, el exsenador reconoció que esas licencias se concedieron cuando las zonas 'estaban consideradas como terreno urbano, aunque pendiente de urbanización', pero añadió que en ningún caso tuvo conciencia 'de haber incumplido la ley, ni mucho menos haber cometido hecho de trascendencia penal'.

El nuevo subdelegado del Gobierno en Guadalajara tomó posesión de su cargo el pasado día nueve, apenas diez días antes de que su partido, el PP, clarificara el tratamiento a sus cargos imputados. En el 17º Congreso que celebró el partido el pasado fin de semana aprobó introducir en sus estatutos la obligatoriedad de abrir expedientes informativos a los afiliados que estén imputados.

Uno de ellos sería Sánchez Sánchez-Seco, al igual que otros cargos del PP del País Valencià. Está por ver la agilidad del partido para comenzar a aplicar esta medida.