Los tres detenidos el pasado miércoles en las provincias de Cádiz y Ciudad Real por su presunta relación con el terrorismo internacional podrían estar preparando un atentado. Esa es la deducción a la que ha llegado el juez de la Audiencia Nacional Pablo Ruz después de visionar el contenido del material videográfico incautado al turco Cengiz Yalcin en una casa de La Línea de la Concepción, donde también guardaba un 'artefacto explosivo de grave potencialidad lesiva', de acuerdo al informe de los TEDAX (especialistas en explosivos) de la Policía nacional. Así lo dice el magistrado en los autos de prisión de los detenidos hechos públicos hoy, aunque la causa sigue declarada secreta.

El juez decretó hoy, a petición del fiscal Pedro Martínez Barrios, prisión incondicional para los dos chechenos detenidos el miércoles en Almuradiel (Ciudad Real),  a quienes acusa de delitos de pertenencia a organización terrorista (castigado con entre 6 y 12 años de cárcel) y tenencia de explosivos (de 8 a 10 años de pena de prisión). En el auto, el juez destaca la vinculación de ambos --Eldar Magomedov y Muhamed Ankari Adamov-- con individuos investigados por sus vínculos con organizaciones terroristas, relación que han reconocido en parte ellos mismos en el interrogatorio de hoy ante el magistrado.

El juez se extiende especialmente en Magomedov, de quien destaca que ocultó voluntariamente su identidad verdadera en su primera comparecencia judicial del pasado viernes, cuando dijo llamarse Ahmad Avar.  Las autoridades rusas han informado de su verdadero nombre. Ruz dice sobre él en el auto de prisión que un testigo protegido en Estados Unidos le atribuye la participación en actividades terroristas a partir de 2010 en Waziristán (Pakistán) y Afganistán.

El juez subraya además las contradicciones detectadas en las declaraciones tanto de Magomedov --conocido por una tercera identidad, Muslim Dost, por algunos servicios secretos internacionales-- como de Muhamed Ankari Adamov --que en principio dijo llamarse sólo Muhamed Adamov--. Los dos emprendieron un periplo por Francia que les condujo a España y en concreto hasta La Línea, donde su amigo turco Yelcin les dió clases de parapente sin motor. De las supuestas gestiones que alegan haber realizado para conseguir asilo político en Francia y España, como finalidad de su vaiaje, no hay noticia oficial ninguna.

También han incurrido en contradicciones sobre el pago del alquiler del piso donde vivían, sobre su relación previa con Yelcin y con respecto a lo declarado hoy por un testigo protegido en la causa denominado con el nombre clave de 'Antonio'.

El juez, que envío a prisión incondicional al turco Yelcin el pasado viernes, amplía hoy que en la casa de La Línea donde éste residía habitualmente había fotos tamaño carné de los dos rusos así como material videográfico que 'pudiere racionalmente sugerir la preparación de algún tipo de acción de carácter o finalidad terrorista'. El magistrado habla además del 'artefacto explosivo de grave potencialidad lesiva' encontrado en su casa de acuerdo al informe del TEDAX, aunque hasta este domingo lo hallado asciende a unos 150 gramos de un explosivo no determinado. Además se localizó un zulo vacío que, según la Policía, pudo haber contenido recientemente explosivos.

Ruz señala que la alegación de Yelcin de que no tiene vinculación con esa casa, que es propiedad de su novia, se contradice con las vigilancias policiales realizadas y las manifestaciones de los otros detenidos, que indicaron que era la vivienda habitual y diaria del turco. El juez pone de manifiesto en los autos que en la investigación han sido especialmente útiles los datos facilitados por las autoridades de Francia, Estados Unidos, Reino Unido y Gibraltar.

En los autos, el juez imputa a los tres detenidos el delito de tenencia de explosivos por el material incautado en casa de Yelcin, y a los dos chechenos además el de pertenencia a organización terrorista, aunque no menciona en el auto en ningún momento a Al Qaeda o a cualquier otra organización concreta en la que pudieran estar integrados.

El juez Ruz decidió el viernes prorrogar 48 horas la detención de los dos chechenos al no encontrar la Fiscalía hasta entonces suficientes pruebas como para pedir su prisión incondicional.  En ese intervalo se han realizado diferentes diligencias, y, tras la declaración de hoy, el fiscal Pedro Martínez Barrios solicitó prisión incondicional para los dos, que fue acordada por el juez.