El secretario general de la OTAN, Anders Fogh Rasmussen, efectúa este jueves una visita de trabajo a España en la que hablará sobre las operaciones en Libia y Afganistán con el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, y con las ministras de Defensa, Carme Chacón, y Exteriores, Trinidad Jiménez.

Rasmussen, que llega a Madrid invitado por Chacón para participar en un seminario en el Senado, tiene previsto acudir al Palacio de la Moncloa a primera hora de la mañana para tratar con Zapatero acerca de la nueva estructura de la OTAN y la situación actual de las operaciones en Libia y en Afganistán.

A continuación, el máximo responsable de la Alianza acudirá al Senado, donde inaugurará, junto con la ministra de Defensa, el seminario 'OTAN y Mediterráneo: los cambios que vienen'.

Posteriormente, Rasmussen y Chacón se trasladarán al Cuartel General del Ejército, donde está prevista una reunión de trabajo.

La llegada del secretario general a España se produce una semana después de que la OTAN decidió cerrar el cuartel de Retamares (Madrid) a cambio de abrir un mando aéreo en España, y a una semana de que el Parlamento dé su visto bueno a la prórroga indefinida de la participación española en Libia.

La OTAN y EEUU han pedido el envío de más unidades a Libia

La pasada semana, durante la reunión de ministros de Defensa de la Alianza, el secretario de Defensa de EEUU, Robert Gates, y Rasmussen pidieron sin éxito el envío de más medios militares a Libia y que algunos países permitieran un uso más flexible de las unidades ya enviadas a la operación.

Otro de los asuntos que abordará Rasmussen con sus interlocutores españoles será Afganistán, donde está previsto que en julio comience la fase de transición de la seguridad a las fuerzas afganas.

En este sentido, Chacón aseguró la semana pasada que España cumplirá los plazos marcados por la OTAN y que transferirá este año a las fuerzas de seguridad afganas la autoridad de la provincia de Herat y en 2012 de la de Baghdis.

En julio, los afganos se harán cargo de la seguridad en siete provincias y distritos, que representan el 25% de la población.