Este pueblo medieval segoviano lo has visto en mil películas

De Orson Welles a Pilar Miró, y de Maribel Verdú a Charlton Heston. Por Pedraza han pasado decenas de estrellas cinematográficas para rodar multitud de películas que aprovechan el delicioso perfil medieval de este pueblo segoviano a un paso de la Comunidad de Madrid. 

Ubicado a más de 1000 metros de altura sobre un cerro al norte de la Sierra de Guadarrama, Pedraza sigue seduciendo al cine un siglo después de que se rodase por primera vez en sus calles. Acompáñanos en este viaje por una de las localidades más visitadas de Segovia descubriendo por qué Pedraza es un pueblo de cine. 

Pedraza, un siglo de cine 

Pedraza - Fuente: Depositphotos
Puerta del castillo de Pedraza – Fuente: Depositphotos

A mediados de los años 20 del siglo pasado, el cine era un espectáculo con apenas tres décadas de existencia. Pero, a pesar de su juventud, su difusión ya era imparable, después de que los hermanos Lumière comprobaran que su invento era capaz de emocionar (y aterrorizar) al espectador como nunca se había visto.  

Y así es como el primer equipo de rodaje aterriza en Pedraza en 1924 para grabar diversas escenas. Fue la película de producción francoespañola La barraca de los monstruos dirigida por Jaque Catelain y Marcel L’Herbier, una cinta que podría haber inspirado a la posterior (y mítica) La parada de los monstruos de Tod Browning.  

¿Y por qué escogieron Pedraza entre tantos pueblos españoles de aire medieval? No cabe duda de que su cercanía con Madrid fue decisiva teniendo en cuenta que una de las productoras de la película tenía su sede en la capital. Pero tampoco cabe duda de que Pedraza lo tenía todo para ser escenario cinematográfico: un buen conservado caserío medieval encaramado a un cerro sobre un tapiz serrano, una magnífica plaza mayor porticada, un impresionante castillo y unas calles empedradas en las que parece haberse detenido el tiempo. 

Aquella película silente de 1924 abrió camino para que las productoras tuvieran en su radar el pueblo de Pedraza que sirvió de escenario, seis años después, a otra cinta de título también seductor: La aldea maldita, dirigida por Florián Rey, uno de los máximos exponentes del cine mudo español anterior a la Guerra Civil. 

Desde entonces, Pedraza ha seguido siendo visitada por la “gente del cine” periódicamente, como cuando un tal Orson Welles se pasó por aquí para rodar una obra maestra incomparable: Campanadas a medianoche. Welles, repudiado en Hollywood por su libertario carácter (y su afición por dilapidar presupuestos) ya era un gran aficionado a España a mediados de los 60 y también se enamoró de Pedraza que, en esta película, se vistió de la Londres medieval. 

Series y anuncios en Pedraza 

Pedraza - Fuente: Depositphotos
Pedraza y la Sierra de Guadarrama – Fuente: Depositphotos

La industria del cine y la televisión ha cambiado mucho en las últimas décadas, pero Pedraza no ha perdido su atractivo como escenario de rodaje. El propio Álex de la Iglesia quiso replicar aquellas cintas mudas de misterio rodadas en el pueblo segoviano hace más de un siglo con su serie 30 monedas protagonizada por Eduard Fernández, Miguel Ángel Silvestre y Megan Montaner. 

Tampoco fue De la Iglesia el primero que se pasó por aquí para rodar una serie. El lustro 2009-2014 fue una etapa magnífica para la proyección turística de Pedraza gracias a cuatro series que se rodaron parcialmente en la localidad: Águila roja, Tierra de lobos, Toledo e Isabel la Católica

Y no nos olvidemos de los anuncios. En 1999, un anuncio mostrado en la Super Bowl —el espacio televisivo anual en el que más cuesta colocar un spot— fue rodado en Pedraza: se trataba de un encierro de San Fermín en el que los toros eran sustituidos por ardillas.  

Pero por Pedraza también han rodado (literalmente) todo tipo de marcas de coches, yogures o la popular Fabada Litoral. Y hasta hemos visto cantar a Montserrat Caballé y Rafael… con David Bustamante y Marta Sánchez. No cabe duda de que todo es posible en las calles de Pedraza. 

Pedraza, esplendor medieval 

Pedraza - Fuente: Depositphotos
Plaza Mayor de Pedraza – Fuente: Depositphotos

Este recordado anuncio es el mejor preámbulo a nuestra visita a Pedraza. Y es que esta localidad brilla con singular fulgor cada principio de julio en los conocidos como Conciertos de las Velas, cuando la música clásica pone banda sonora al inicio del verano pedrazano. 

Pero sea verano o invierno, de noche o de día, toda visita a Pedraza comienza por la Puerta de la Villa… no solo por capricho, sino por obligación: no hay otra forma de entrar en el pueblo que por esta magnífica puerta de origen medieval reconstruida en el siglo XVI. Ubicada en el extremo oriental del pueblo, en el final del camino que sube por el cerro sobre el que se eleva Pedraza, esta puerta era la única apertura de la vieja muralla medieval lo que facilitaba su defensa, evitando entradas indeseadas… y salidas. 

Tras pasar la puerta nos encontramos con la Cárcel de la Villa, un edificio restaurado que nos muestra cómo la realidad, a veces, supera a la ficción: una visita guiada recuerda el terrible escenario en el que malvivían (y morían) los presos de esta cárcel. 

Igual de relevante a nivel histórico, aunque más agradable de ver es la calle Real, escenario de innumerables escenas de las películas, series y anuncios descritos que nos conducen a la plaza Mayor, otro emblema segoviano. Se trata de una plaza de perfil irregular con varios edificios porticados y la presencia de la iglesia de San Juan Bautista de origen románico con añadidos barrocos. 

Y aún nos falta otro rincón icónico del pueblo, el arranque de la calle Mayor desde la plaza, frente a la iglesia, que conduce al castillo, antiguo centinela pedrazano ubicado en el extremo noroccidental del cerro. Fue construido en el siglo XIII y reedificado en el XVI.  

Pedraza - Fuente: Depositphotos
Calles de Pedraza – Fuente: Depositphotos

Apenas dos años después de que llegara el cine a Pedraza, el pintor vasco Ignacio Zuloaga, sobrino del famoso ceramista Daniel Zuloaga, compró el castillo, lo restauró y lo convirtió en su taller. Hoy, el castillo incluye un museo dedicado a este pintor famoso por su estilo tenebroso inspirado en Goya o el Greco, pero también por homenajear al Franco en uno de sus retratos más bizarros: el dictador llegó a regalar tres cuadros de Zuloaga a Hitler. 

Pero para irnos de Pedraza con el mejor sabor de boca posible, hay que recordar que el pueblo no es solo su delicioso caserío medieval, sino también su magnífico envoltorio natural que podemos empezar a disfrutar visitando, en primer lugar, la Casa del Águila Imperial, un centro de interpretación de referencia del Parque Natural Sierra Norte de Guadarrama que se ubica a un par de minutos al oeste del pueblo. 

Y si vas a quedarte más de un día por la zona, te recomendamos una de las rutas de senderismo que recorren el entorno, especialmente la combinación de la Ruta de la Tierra de Pedraza y la Ruta de Dehesilla Vieja que arranca justamente en la Casa del Águila Imperial y que nos lleva a lo largo de 30 kilómetros a recorrer los pueblos del entorno de Pedraza: La Velilla, Pajares de Pedraza, Requijada y Arahuetes, una ruta que recuerda también el origen de la Comunidad de Villa y Tierra de Pedraza como Consejo Comunero allá por el siglo XI. 

1 Comment

  1. No conozco el pueblo que parece encantador, y bien conservado, solo conozco el pueblo de el *Espinar, cerca de los *Angeles de S Rafael(famoso desgraciadamente por el derrumbe de su urbanización en el franquismo) donde pasé algunos veranos una semana donde varios cristianos de diversas confesiones convivíamos y rezábamos con normalidad, y evitábamos como debe ser guerras de religión que no llevan a nada. También visité la capital, que me pareció pequeña pero encantadora por su patrimonio románico y mudéjar (catedral, alcázar) y romano (acueducto) y famosa por sus cochinillos y rotos por el plato.

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