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Crece la ofensiva global de la 'ciberguerrilla' por Wikileaks

El grupo 'Anonymous' se coordina para atacar las web de Amazon, Visa y Lieberman

MIGUEL ÁNGEL CRIADO

'Prestad atención ciudadanos, gobiernos y el mundo entero. La campaña pacífica de Anonymous irá contra cualquier organización, corporación, Gobierno o entidad hasta que internet sea completamente libre'. Es la advertencia lanzada ayer por el grupo de internautas que está detrás de los ataques que, desde hace una semana, sufren las webs de todas aquellas empresas y organizaciones que participen en la campaña de acoso a Wikileaks y su creador, Julian Assange.

Bajo el ataque coordinado de miles de ordenadores, han caído páginas financieras y también políticas. La más castigada era uno de los sitios de PayPal, la principal empresa de pagos por internet, caída durante varias horas. Pero también estuvieron inaccesibles temporalmente las de Visa y MasterCard que, por segundo día consecutivo, sufrían este ataque, conocido en la jerga de seguridad como DDoS (ataque distribuido de denegación de servicio). Las tres firmas atacadas habían cortado el grifo financiero a Julian Assange y Wikileaks, que estaban recibiendo miles de donaciones anónimas por internet.

Una página del sistema de pagos PayPal estuvo caída ayer varias horas

Los organizadores del ataque, el colectivo Anonymous, ha conseguido que centenares o quizá miles de internautas se tomen la molestia de instalar en su ordenador un programa que, convenientemente modificado, hace continuas consultas y petición de datos al servidor de una web. Además, lo hace de forma coordinada con el resto de personas que lo instalaron, de ahí que se llame 'ataque distribuido'.

Con ese arsenal, Anonymous llamó al ejército de voluntarios a lanzar una ofensiva contra Amazon. La tienda de libros es conocida por tener una de las mejores infraestructuras de servidores de internet. Por esa razón, Assange albergó los cables y el resto del contenido de Wikileaks en sus máquinas. Pero la compañía estadounidense desalojó al organismo poco después de que se lo pidiera el senador y responsable del Comité de Seguridad Interior del Senado de EEUU, Joe Lieberman. Ayer, Anonymous dirigó sus huestas contra Amazon, pero para tumbarla necesitaba al menos 5.000 ordenadores trabajando contra esa sede todos a la vez. Al no conseguirlo, dirigió sus máquinas contra PayPal y logró echarla abajo.

Lieberman tampoco se ha librado y su web en el Senado ha estado fuera de juego durante horas. Como le ha ocurrido a la antigua candidata republicana a la presidencia de EEUU, Sarah Palin, que comparó a Assange con Bin Laden. También han caído a golpe de DDoS las páginas de la Fiscalía General de Suecia y la del abogado que representa a las dos mujeres que acusan de abusos sexuales al fundador de Wikileaks.

Se han hecho con números de Visa sólo para demostrar que podían hacerlo

Tanto Visa como MasterCard han reconocido los ataques pero han negado que las cuentas se hayan visto comprometidas. La segunda sí ha reconocido que su sistema para asegurar transacciones, el Secure Code, quedó inutilizado. A última hora de ayer, Anonymous también dijo haber obtenido números de tarjetas de crédito de Visa, aclarando que sólo pretendía demostrar hasta dónde podían llegar.

Uno de los miembros de Anonymous aseguró ayer a la BBC que los ataques seguirán. 'La campaña no ha acabado; por lo que estamos viendo, esto irá a más. Cada vez más personas se están uniendo, más y más están descargando la herramienta para crear una red voluntaria de ordenadores zombis que les permita lanzar ataques DDoS', dijo.

En esta ofensiva, a la que llaman 'la primera ciberguerra', los activistas están usando varias armas tecnológicas. Además de los programas para ataques, como el Low Orbit Ion Cannon (LOIC), usan servicios de chats, como el IRC, para comunicarse, y las redes sociales como altavoz de sus consignas. Twitter, por ejemplo, está siendo usado para llamar a la ofensiva a los que se han descargado LOIC.

Pero los responsables de Twitter, que ya habían sido acusados de alterar el ranking de temas más populares para hacer desaparecer los referidos a Wikileaks y Assange, han decidido abortar estas llamadas a la acción. Así, borraron la cuenta Anon_Operation apenas se percataron de que desde ella se coordinaba el ataque contra Visa.com. En el momento de borrarla, era seguida por más de 22.000 internautas. El borrado llevó a algunos a plantearse atacar Twitter, pero la idea parece haber sido desechada, pues les conviene que esta red de microblogs, que informa de sus actividades, esté más viva que muerta. Cuando Twitter les cierra una cuenta, abren otra con alguna letra cambiada.

Por su parte, Facebook, que conserva la web de apoyo a Assange (ya con más de 1,2 millones de seguidores) también borró una página del colectivo Anonymous que relataba sus ofensivas. El grupo ya tiene una nueva activa: Operation Payback LIVE Reports.

Pero Anonymous también recibe. La página oficial del ataque (https://anonops.net), sufrió tal contraataque a comienzos de semana que ni se han molestado en levantarla. Los servidores de chat IRC que usan para coordinarse también estaban ayer sobrecargados, pero se desconoce si estaban siendo atacados.

Además, según la prensa local holandesa, un joven de 16 años fue detenido ayer por participar en los ataques contra Visa y PayPal. Y el fiscal general de EEUU anunció que investigará esas acciones. No se sabe cuál será su siguiente objetivo, pero Anonymous está traduciendo a otros idiomas los programas y las guías de uso que están utilizando para extender la protesta.

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