El grupo parlamentario confederal Unidos Podemos-En Comú Podem-En Marea ha pedido este miércoles a Mariano Rajoy que no aplique el Artículo 155, que el Ejecutivo ya ha puesto en marcha en su primera fase, y le ha exigido que en su lugar afronte de una vez por todas el "problema político" en Catalunya "desde el diálogo". El líder del grupo confederal, Pablo Iglesias, ha exhortado al presidente del Gobierno a que "deje de actuar como jefe del PP" y actúe como jefe del Ejecutivo, a que "deje de romper España". "Póngase al frente de la negociación y no detrás de la Policía y de la ley", le espetaba.

Con referencias a Adolfo Suárez, Josep Tarradellas o incluso a la presidenta de la cámara y miembro del PP, Ana Pastor, el líder de Podemos ha insistido en que "la tradición política" a la que representa Rajoy, "dominante en los últimos 200 años", "nunca reconoció la plurinacionalidad, pero tuvo que lidiar con ella". "No tengo hijos todavía, pero me gustaría tenerlos, y me gustaría que conocieran Catalunya como parte del proyecto colectivo que es España", finalizaba el líder de Podemos.

Xavier Doménech, portavoz de En Comú Podem, ha reprochado a Rajoy que centrase su intervención en el Congreso en el relato de las actuaciones de la Fiscalía y los cuerpos de seguridad en Catalunya, pero no en "propuestas políticas", y le ha insistido en que la solución para Catalunya pasa por el diálogo: "Diálogo, diálogo, diálogo. Y, si no pueden dialogar, márchense" zanjaba.

En la misma línea, el coordinador federal de IU, Alberto Garzón, ha defendido que es necesario "revisar la Constitución" para "adaptarla a una sociedad que ha cambiado. "Hay que ser audaces y valientes", apuntaba.

Por su parte, la portavoz de En Marea, Yolanda Díaz, ha pedido a su homóloga en el grupo socialista, Margarita Robles, que no permita al PP -entonces Alianza Popular-, "que no votó la Constitución, que se apropie de ella", y ha espetado a los ministros y al presidente que "no comprenden a Catalunya y quieren aplastar la plurinacionalidad". "Detengamos el odio como arma política". "La demanda del referéndum es la única salida", apostillaba.