MADRID.- Mariano Rajoy ha presidido este miércoles por la mañana en el Claustro de los Jerónimos del Museo del Prado su primer acto institucional de la legislatura en el Día Internacional contra la Violencia de Género, el 25 de noviembre. El presidente del Gobierno, como hizo su ministro de Sanidad, Alfonso Alonso, ha alertado durante su intervención sobre el incremento del maltrato machista entre adolescentes, con menores que aceptan "situaciones de control y violencia" sobre su vida.

Las redes sociales "difíciles de controlar" son, según Rajoy, el instrumento más empleado por los maltratadores jóvenes, por lo que el jefe del Ejecutivo ha subrayado la "prevención" como la mejor forma para erradicar estas acciones violentas sobre menores. El jefe del Ejecutivo ha señalado al ministro de Educación, Íñigo Méndez de Vigo -presente en el acto junto al titular de Sanidad-, como uno de los puntales del trabajo de su Gobierno en esta labor de concienciación contra el machismo en los adolescentes.

Antes de sus palabras y del reconocimiento hecho en el acto a distintas personalidades y colectivos por su labor contra la violencia contra las mujeres, Rajoy ha visitado un centro de la Comunidad de Madrid especializado en mujeres adolescentes víctimas de violencia de género, donde el presidente conversó con las responsables y trabajadoras del centro para informarse de primera mano sobre este problema creciente, confirmaron fuentes de La Moncloa.

Reconocimiento público

El jefe del Ejecutivo animó a las mujeres a salir del círculo de la violencia machista llamando al 016 y pidiendo "ayuda", e informó de que "ocho de cada diez mujeres han logrado dejar atrás el maltrato". Además, Rajoy felicitó por su labor a las personas y asociaciones volcadas en ayudar a las víctimas del maltrato, entre las que citó también a los "huérfanos". El Gobierno ha reconocido en este 25-N el trabajo individual, entre otros, de la productora y activista contra la trata, Mabel Lozano, o, a título póstumo, de la fiscal Soledad Cazorla.

Asimismo, se ha querido premiar públicamente la labor de las asociaciones Ceps, Acnur o a las ocho mujeres que narraban su sufrimiento con el maltrato machista en el documental 'Amores que duelen'.