El accidente del autocar de la compañía Alsa que este pasado lunes se salió de la carretera y volcó mientras subía a los Lagos de Covadonga "pudo ser una auténtica tragedia", en palabras de Adrián Barbón, presidente del Principado de Asturias. Afortunadamente no lo fue. Si el autobús hubiera prolongado su caída por la pendiente unos metros más, probablemente hubiera habido víctimas mortales. El balance final no deja ningún fallecido: seis personas han resultado heridas graves "con pronóstico reservado", otras seis menos graves y 37 leves tras despeñarse el autobús con 48 pasajeros y el conductor.

Entre los heridos hay al menos un extranjero de nacionalidad austriaca y vecinos de Madrid, Aragón, Catalunya, Andalucía y Extremadura que se encontraban de vacaciones por Asturias. Entre los 48 pasajeros, había diez menores de entre ocho meses y 13 años, ninguno de los cuales sufrió heridas de gravedad, aunque sí fueron trasladados hasta los hospitales de Arriondas y Gijón junto a sus familias.

El accidente tuvo lugar poco antes de las 12.00 horas del mediodía a la altura del kilómetro C0-4, la carretera que une Covadonga y los Lagos, trayecto que, dada la elevada frecuencia de viajeros que hay en verano, tiene limitada la circulación de vehículos privados y se cubre principalmente con autobuses.

El autobús accidentado se salió de la calzada por el margen derecho tras superar el Mirador de la Reina y, según testigos presenciales, tras dar dos vueltas de campana, se detuvo sobre uno de sus costados en una zona en pendiente, con vegetación baja y sin arbolado.

Aunque las causas del accidente están siendo objeto de investigación, algunos pasajeros han comentado que el autobús iba a poca velocidad y que volcó después de frenar y cruzarse con otro vehículo que circulaba en dirección contraria.

Los conductores más experimentados

El autobús, con una antigüedad de nueve años y cuatro meses y equipado con cinturones de seguridad, había pasado la ITV a principios de este mes, y el conductor, un profesional con 21 años de experiencia que habitualmente hace este trayecto, había hecho su descanso reglamentario los días 25 y 26 de julio, según Alsa.

Esta ruta en la zona más visitada de los Picos de Europa la llevan a cabo "los conductores más experimentados" y, según la compañía, cuentan además con una "formación específica en conducción en carreteras de alta montaña".

El presidente del Principado, Adrián Barbón, siguió el dispositivo y las labores de asistencia desde Luarca, en el occidente de Asturias, donde celebra la última reunión del Consejo de Gobierno de la pasada legislatura. "Pudo ser una auténtica tragedia", ha señalado el presidente asturiano.

Alsa es la encargada de gestionar el plan de acceso a Covadonga y Los Lagos desde que el Consorcio de Transportes de Asturias puso en marcha hace 18 años para evitar los grandes atascos y problemas que se generaban en los meses estivales y algunas festividades por la gran afluencia de turistas.

Para evitarlo, durante estos meses queda limitado el tráfico de vehículos privados entre las 7:30 y las 21.00 horas, aunque los que acceden a esta zona del Parque Nacional de Picos después de la 21.00 horas luego pueden bajar al día siguiente con su coche.

Durante el pasado año, más de 250.000 turistas utilizaron el servicio de Alsa para visitar esta zona de Picos de Europa, la más transitada del parque. Según Alsa, en los 18 años que lleva dando este servicio han transportado a más de 2,5 millones de personas sin haber registrado ningún accidente similar.