Este artículo se publicó hace 15 años.
ACEL recurrirá sentencia TSJ por vulnerar derecho a declarar sobre religión
La Asociación Cultural Escuela Laica (ACEL) recurrirá la sentencia del Tribunal Superior de Justicia (TSJ) sobre la retirada de crucifijos del colegio Macías Picavea de Valladolid, por considerar que vulnera el derecho constitucional a no declarar sobre ideología, religión o creencias.
El Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León (TSJCyL) resolvió ayer mediante una sentencia que la permanencia o retirada de los símbolos religiosos en dicho colegio público depende de la existencia o inexistencia de peticiones de retirada.
La sentencia expone que, en el caso de los padres que solicitaron la retirada de los crucifijos, procede su retirada sólo en las aulas donde los padres entienden que perturba a sus hijos, una decisión que se extiende también a los espacios comunes.
El presidente de ACEL, Carlos Parrado, ha explicado en una rueda de prensa que ven positivo que la sentencia del TSJCyL reconozca que la presencia de símbolos religiosos en los colegios vulnera derechos fundamentales, pero lamentan que deje en manos de los padres la solicitud de retirarlos.
Para Parrado, la solución propuesta vulnera el derecho de las personas a no declarar sobre su ideología, religión o creencia, que reconoce el artículo 16.2 de la Constitución española.
Según las Ley Orgánica de Educación (LOE), todo el centro educativo constituye un espacio común, lo que desde ACEL argumentarán en el recurso de casación que presentarán ante el Tribunal Supremo.
Desde la asociación, consideran que la sentencia del TSJ no tiene en cuenta este aspecto cuando contempla la posibilidad de eliminar los crucifijos de determinadas aulas si así lo solicitan los padres de los alumnos.
"Los niños no realizan sus actividades lectivas en un sólo aula, sino que cambian dependiendo de la actividad, e incluso en los tiempos libres y recreos visitan otras aulas en los que están sus amigos", ha precisado.
El hecho de retirar los crucifijos de las aulas donde lo pidan los padres puede llevar "a situaciones realmente peligrosas", como la "segregación de los alumnos en función de la ideología, las creencias o las convicciones de los padres", ha incidido.
"Si los símbolos pueden o no estar en las aulas dependiendo de que algún padre lo solicite, cuando haya más de un grupo por curso se daría el caso de que habría un aula para los que deseen símbolos y otra para los que no lo deseen, algo así como 3º con símbolos y 3º sin símbolos", ha añadido Parrado.
El abogado de ACEL, José Alberto Blanco, ha agregado que la sentencia del TSJ da una competencia de decisión ideológica que los consejos escolares no tienen por ley, lo que alegarán ante el Tribunal Supremo.
Comentarios de nuestros suscriptores/as
¿Quieres comentar?Para ver los comentarios de nuestros suscriptores y suscriptoras, primero tienes que iniciar sesión o registrarte.